A Tokio la amenazan todos, por lo menos, desde que tengo uso de razón. En los Sesentas y Setentas eran los monstruos del espacio, pero existía, en el imaginario de entonces, personajes como Ultra Siete que estaban dispuestos a salvarla de la invasión alienígena. Después aparecieron otros personajes como Goldar que se convertía en cohete o, en tiempos más recientes, han tenido a los Power Rangers. Pero en el 2020 y 2021 la suerte de Tokio y de los Juegos Olímpicos, pareciera que nada los salvará.
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Y es que no aparece aún ese gran superhéroe que logre vencer el virus mortal. Ayer, 4 de enero, el calendario marcó que estábamos a exactamente 200 días de la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos.
Precisamente ayer, el gobierno japonés dejó entrever que podía declarar el Estado de Emergencia en Tokio ante el aumento de casos de coronavirus, extendiendo nuevamente sobre la capital nipona nuevas dudas en la organización de los Juegos cuyo disparo de salida está programado para el 23 de julio.
El primer ministro, Yoshihide Suga, reconoce que las cifras en Tokio son muy pequeñas en comparación con las que se dan a conocer día tras día en Europa, pero en la isla no quieren correr ningún riesgo.
Comienza el 2021 con una ola de dudas. Ya de por si es extraño que los Juegos Olímpicos se lleven a cabo en un año “no olímpico”, es decir, rompiendo la tradición que comenzó en el 776 antes de Cristo de organizar una competición multideportiva cada cuatro años (término que los griegos de la antigüedad acuñaron como Olimpiada). De hecho, sería la primera vez en la era moderna en la que los Juegos se lleven a cabo en un año en el que no les corresponde.
En los tiempos antiguos, esto de “correr” los Juegos a un año no olímpico solo había ocurrido dos veces, una de ellas fue cuando los griegos, cuenta la historia, tuvieron que aceptar el “capricho” de Nerón quien pidió que posterguen los juegos para poder competir en ellos.
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La cuenta regresiva sigue y la incertidumbre en el mundo del deporte se mantiene intacta. Los deportistas, las federaciones y los Comités Olímpicos Nacionales mantienen la fe de que se podrán disputar aún. Los 17 peruanos clasificados hasta el momento a los Olímpicos y los cuatro a los Paralímpicos siguen entrenando con toda la ilusión, y los más otros siguen preparándose pensando en clasificar.
No hay bola de cristal que diga lo que pasará dentro de 200 días… nadie creía tampoco que hace 296 se decretó la Emergencia Sanitaria en el Perú. ¿Y si se hacen los Juegos igual? ¿Quiénes irían? ¿Los aeropuertos estarán abiertos? ¿Habrá 14 días de cuarentena obligatoria al llegar? Hay muchas preguntas sin respuesta aún. Como buen olímpico, esperamos que los Juegos se puedan realizar, pero con salud y sin poner en riesgo la integridad de nadie.
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