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Desde hace 180 años El Comercio tiene la misión de contar la historia del Perú y mantener informada a su gente. Está en nuestro ADN, en nuestra forma de vida y es vocación de cada persona que ingresa a trabajar en esta casa editora.
Es de evidente conocimiento para todos que desde hace unos meses el mundo vive una situación de crisis sanitaria y social producto de la pandemia del COVID-19 que ha puesto en estado de emergencia al Perú.
Desde hace unos meses también, nuestro diario inició su incursión en el modelo de suscripciones digitales siguiendo la tendencia global de los medios líderes en comunicación. Pero hace dos semanas, a diferencia de otros medios de referencia, tomamos la decisión de liberar absolutamente todo el contenido relacionado al coronavirus. Adicionalmente, en vista que vivimos una coyuntura de emergencia, hemos reducido el número de notas diarias exclusivas para suscriptores digitales a fin de que la audiencia tenga mayor amplitud informativa. Confiamos que nuestros suscriptores abrazarán este necesario gesto en tiempos desafiantes. Sentimos que es nuestro deber en esta etapa de aislamiento social decretada por el gobierno.
Profundo es nuestro deseo de que este periodo que nos ha tocado vivir acabe pronto y sin más hechos que lamentar. Por el bien de sus familias, de las nuestras y de todo el mundo. Nosotros, desde la redacción central o incluso desde nuestras casas, seguiremos cumpliendo con ese deber que hoy nos diferencia y nos hace creer más en lo que hacemos. Hoy más que nunca trabajamos para seguir haciendo del periodismo la más noble de las profesiones.
