Son 7.766 las personas que se acogieron al régimen temporal del Impuesto a la Renta para la declaración, repatriación e inversión de rentas no declaradas, informó la Sunat. Según la cuenta de Twitter de la institución, el impuesto recaudado por este concepto sumó S/1.136 millones.
Esta cifra no logró alcanzar la meta que el Ministerio de Economía (MEF) había calculado para el 2017 en el último Marco Macroeconómico Multianual (MMM): casi S/2.500 millones (0,35% del PBI). Además, Claudia Suárez, superintendenta nacional adjunta de Tributos Internos de la Sunat, había anunciado que el número de contribuyentes que podrían acogerse superaría los 8.000.
Para Arturo Tuesta, socio líder del Área Tributaria de PwC, la amnistía en términos generales no fue un fracaso, debido a que hubo interés de los contribuyentes por transparentar sus patrimonios.
“Ha tenido fallas que han impedido el éxito total que se quería pero, básicamente, hay algo que rescatar: hubo interés de transparentar”, apunta.
Sin embargo, dijo que no se puede hablar de un éxito rotundo, debido a que la recaudación no logró alcanzar la meta del gobierno.
De otro lado, este año, de acuerdo con el MMM, la amnistía debería recaudar 0,22% del PBI (alrededor de S/1.500 millones). Según Tuesta, esto provendrá de la regularización de los pagos que aún quedan pendientes de los años fiscales 2016 y 2017. “Algunas personas pagarán [lo correspondiente] al 2016 en enero. En marzo, deberá pagarse [la renta] del 2017”, explica.
DISTRIBUCIÓN
Según la norma, las personas que se acogían a la amnistía estaban sujetas a una tasa impositiva del 10% sobre los bienes declarados y de 7% siempre y cuando los activos sean repatriados.
La Sunat informó que el capital acogido sumó S/12.410 millones, de los cuales solo el 28% (S/3.497 millones) fue repatriado.