Desde el CADE Ejecutivos 2023, Cristián Arratia, CEO de Conelsur, comenta los avances de su proceso de diversificación de líneas de negocio. Asimismo, destaca la transmisión del expertise de su matriz, la chilena Transelec, y cómo viene aplicando esas capacidades en el Perú.
Sobre la diversificación del negocio de Conelsur, ¿cuáles son los objetivos trazados en el mediano y largo plazo con este trabajo?
Conelsur es la filial en el Perú de Transelec, la principal empresa transmisora de Chile, y siempre estamos mirando muy de cerca lo que hace Transelec para traer las mejores prácticas y todo el expertise y experiencia que tiene en sus más de 30 años. Conelsur está muy pendiente de un proceso actual en el que está Transelec, que es la diversificación del negocio, ya sea vinculado al negocio de la transmisión o a los negocios adyacentes. Por ejemplo, Transelec hoy está ejecutando un proyecto de una planta desaladora en conjunto con otra compañía. Uno puede decir “no se relaciona mucho con la transmisión”, pero son proyectos lineales. Estructuralmente es construir una tubería a lo largo del desierto.
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¿Dónde se ubica esta planta?
Está en el norte de Chile, en la parte de Tocopilla, y tiene como objeto dar agua a una minera. Como te decía, siempre estamos mirando muy de cerca y eso es una invitación a mirar el negocio también fuera de la caja. Transelec hace un par de años empezó a ver cómo entraba la competencia y eso fue una invitación a los ejecutivos de la compañía a diversificar el negocio, a poner los huevos en distintas canastas. Esa experiencia es la que queremos traer en Conelsur.
Imagino que deben tener dos equipos dentro de la organización.
Conelsur todavía es una organización pequeña, vamos a cumplir siete años en la compañía, pero trabajamos muy de la mano con los equipos de Transelec. Por lo tanto los equipos de negocios, de finanzas, de regulación legal, mantenemos un trabajo continuo que nos facilita traer las mejores prácticas de Transelec en el meracdo peruano.
¿Cuál es la meta de proyecto el próximo año?
Desde que asumí la gerencia general de la compañía en enero de este año, decidimos ponernos como objetivo duplicar el tamaño de Conelsur en un plazo de cuatro años. Este año fue más de análisis del mercado, ver las distintas alternativas de negocio, tenemos un pipeline de proyectos que está en evaluación para ver dónde apostamos el próximo año nuestro crecimiento, tanto en proyectos públicos de Osinergmin como de Proinversión, pero también con un enfoque bien marcado al desarrollo del negocio privado. Vale decir: construir soluciones de transmisión para clientes mineros o de otros sectores industriales, o también a través de la compra de activos de transmisión que ya estén en operación. Nosotros ofrecemos con toda la experiencia que tenemos le decimos al cliente minero o industrial: “compro tu activo de transmisión, te lo administro, opero y mantengo como un experto, y además te doy flujo de caja”.
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¿Qué proyectos del pipeline están en el Perú?
Es un pipeline en evaluación. Tenemos mapeados alrededor de US$3.000 millones en proyectos como pipeline completo. Luego los equipos de negocios y regulación los inician a mirar en detalle para ver el próximo año en qué proyectos apostaremos.
En el Perú, intuyo, que debe ser el mismo análisis. ¿Cómo analizan el mercado peruano?
El mercado peruano no es muy distinto al mercado chileno, los dolores son muy parecidos. Por ejemplo, el retraso en la planificación de la transmisión por parte de la autoridad, la dificultad en los permisos que afecta el desarrollo de los proyectos en el plazo, y vemos una incidente oposición de las comunidades que muchas veces sin grandes justificaciones se oponen a los proyectos con el único objeto de obtener mayores réditos económicos. Esto se ve en Chile, Perú, he conversado con actores del mercado en Colombia y Ecuador y los dolores son exactamente los mismos. Eso nos lleva a mirar con mayor profundidad y detalle los proyectos del sector público.
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¿Qué previsiones están tomando ante el Fenómeno del Niño?
Hemos adelantado algunos proyectos destinados para el 2024 o 2025, hemos adelantado su ejecución al 2023 con el objetivo de proteger nuestras instalaciones del Fenómeno del Niño. Hasta el momento nos sentimos tranquilos y confiados de que aquello que hemos planificado nos va a ayudar a superar con éxito el desafío climático.
¿Qué proyectos adelantaron?
Tenemos un proyecto específico de construcción y reforzamiento o de barreras que tienen por objeto proteger las torres de alta tensión. Esta también es una invitación a mirar de manera distinta la ejecución de proyectos.