La campaña escolar no ha vuelto a ser la misma desde el 2019. No lo fue en el 2020, cuando se vio interrumpida por la llegada del COVID-19; tampoco en el 2021, cuando las clases fueron virtuales. Ni el año pasado, con un retorno paulatino hacia las aulas.
Para este 2023, las expectativas eran mejores e, incluso, se esperaba que se avance hacia la recuperación del sector. Y realmente iba siendo así , en la primera etapa de la campaña escolar, para los fabricantes e importadores de útiles escolares.
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“La campaña (escolar) empezó en septiembre con la preventa a un grupo de clientes. En octubre recibimos los pedidos [de los clientes mayoristas y distribuidores] y en los últimos meses del año empezamos a despachar. Hemos distribuido muy bien hasta que en diciembre se paró [todo] por las protestas”, cuenta Rodolfo Salas, gerente comercial de Continental, grupo dueño de las marcas Standford, Atlas, Conti y la cadena ‘retail’ de útiles escolares Utilex.
En efecto, la convulsión social que vive nuestro país y que mantiene varias vías terrestres bloqueadas, sobre todo en el sur– y con intermitencia en el norte y centro–, traza hoy un nuevo desafío para la campaña.
Moyra Rodríguez, consultora asociada de Arellano Consultoría, comenta que a nivel de fabricantes e importadores hay dos situaciones: quienes pudieron despachar antes del 7 de diciembre [autogolpe de Castillo] y quienes no adelantaron pedidos o despachos a esa fecha.
“El abastecimiento a nivel distribuidor a la fecha, en las regiones, está casi dentro de lo previsto, salvo en el sur, donde habrían hasta tres semanas de atraso en algunos despachos”, explica a Día1.
Los fabricantes e importadores de útiles escolares consultados para este informe coinciden en que gran parte de sus despachos han ido llegando a sus destinos; no obstante, lo que más les preocupa es la colocación en los canales minoristas y la venta hacia el consumidor final, cuyo pico de campaña suele ser desde la primera quincena de febrero al 15 de marzo.
“El flujo de dinero no queda solo en lo que nosotros abastecemos sino en apoyar a nuestros socios estratégicos a que puedan rotar la mercadería, el momento de la venta es el otro 50% de nuestro negocio” explica Mariano Morales, brand manager de la marca Alpha de Tai Heng, uno de los tres fabricantes y distribuidores más grandes del sector.
Javier Díaz, gerente general de Arti, dueña de Arti Creativo y que representa marcas como Uhu y Stabilo, sostiene que quizá los últimos despachos se puedan ver afectados en el sur, pero “hay que mirar a la venta al consumidor, para que haya reposición no solo en campaña sino en el año”. Asegura que les ha ido muy bien en sus ventas, pero ve un riesgo en el ‘sell out’ (venta al consumidor) en el sur del país.
Al margen de si tienen o no la mercadería, agrega Salas, al consumidor del sur se le agotan sus recursos (por la menos actividad comercial y mayores precios), por eso hay que ver qué va a pasar frente a ello.
Comerciantes en zonas de protestas _ En las zonas en riesgo, Puno, Juliaca y Madre de Dios, el número de minoristas y feriantes podría alcanzar alrededor de 400 comerciantes, calculan en Arellano Consultoría.
Canales de venta_ En específico, agrega la consultora, la zona sur conserva la costumbre de las ferias escolares tanto a nivel minorista como las dirigidas al consumidor final, las cuales estarían en franco riesgo de concretarse.
Las regiones del norte y Lima, sí tendrían optimismo. Salas menciona que los bloqueos en las vías del norte son intermitentes, al igual que en Huancayo, mientras que en el sur es más efervescente. “El problema es que si en las fechas más cercanas a la campaña escolar (en la fase de la venta al consumidor final) se empieza a radicalizar en esas zonas, ahí sí nos va a complicar”, sostiene. En el norte, ahora la situación está avanzando de manera más natural.
La campaña 2023, sostiene, empezaba con optimismo, debido a que el año pasado por fin se habían vendido casi la totalidad de los inventarios que quedaron el 2020, cuando se paró la campaña por la pandemia.
Es por esto que la proyección para esta campaña era, inicialmente, superior a la del 2022, pero sin lograr todavía los niveles del 2019, sostienen desde Arellano.
Las preocupaciones
Salas, de Continental, indica que como no todos los clientes han recibido mercadería de todas las marcas, no tendrían ‘stock’ para toda una campaña.
“Nos preocupa porque si se siguen alargando [los bloqueos] afectará a la venta final y eso podría traer problemas y prórrogas a las cobranzas [por parte de sus clientes al no vender como proyectaban]. Nosotros ya colocamos la mercadería”, afirma Paul Rosado, gerente general de Layconsa. La rotura de la cadena de pagos, remarca Rodríguez, es la principal tribulación del sector.
"Si esta situación se prolonga hasta febrero, [los créditos para financiar la campaña escolar] caerán 60% a 70% en el país".
Jorge Solis, presidente de la Federación Peruana de Cajas Municipales de Ahorro y Crédito (Fepcmac)
De acuerdo a Arellano, las regiones del sur de nuestro país representan alrededor de un 25% de todas las ventas que realizan los fabricantes e importadores de útiles escolares.
Pese a ello, para Díaz aún hay expectativa de que sea una campaña mejor que la del 2022 en valor, pero menor en unidades, como efecto de los mayores precios de los útiles.
¿Cuánto subieron? _
Los útiles escolares este año han subido de precio, en promedio, de 15% a 20% durante este año frente al 2022, estima Rodolfo Salas, gerente comercial de Continental.
Es más, productos ligados a papel como cuadernos o papelería habrían tenido un aumento en el rango del 20% a 30%,cuenta Mariano Morales, brand manager de la marca Alpha de Tai Heng.
¿Por qué? _
Las principales razones que explican este incremento, que varía según la categoría, se debe a la inflación, el alza de los precios internacionales de insumos como el acero o los plásticos. Y también el costo de los fletes, más aún en el caso de importadores, nos comenta Javier Díaz, gerente general de Arti, compañía que este año cumple 75 años en el mercado.
Ante estos mayores precios de los insumos, e incluso algunos momentos de escasez de estos. algunos productos como cuadernos tendrá una menor oferta frente a la demanda, además, porque no ha habido mucho insumos como papel y cartón y eso ha impactado en los inventarios.
Stock para esta campaña_
En medio de este contexto, probablemente, habrá quiebres de inventario en algunas categorías de productos, proyecta Salas. “Hemos hecho una gran producción, pero no llegamos a los niveles del 2019. Estamos preparados para cubrir, pero sí creemos que habrá falta de stock”, explica.
Ante el avance en los bloqueos de las vías, Salas comenta que ya no solo son los clientes en el sur los que se preocupan sobre cómo estará su región para el inicio de la campaña escolar. O se preguntan si habrá o no campaña en febrero. “La incertidumbre es alta”, indica Rodríguez, de Arellano.
“Los bloqueos y manifestaciones sí podrían impactar en el caso de los despachos pendientes no se lleguen a realizar, pero también por las limitaciones en la atención y en la apertura de los puntos de venta. Recordemos que la venta sigue siendo presencial”, apunta la analista.
Venta al cliente final
Hasta el momento, a nivel de las entidades financieras, las colocaciones en el sur del país están cayendo en un 40% para esta campaña de regreso a clases, comenta Jorge Solís, presidente de la Federación Peruana de Cajas Municipales de Ahorro y Crédito (Fepcmac).
“El impacto es a nivel país, ya que todo está vinculado, si esta situación se prolonga la caída será de 60% a 70% [de los créditos para financiar la campaña] en el país. La campaña pinta bastante sombría, si esto sigue así hasta febrero creo que la campaña estará perdida”, proyecta. Las mypes de comercio, confecciones, calzados y útiles que participan de ella son las que, por estas fechas, en enero y febrero, se suelen dedicar a producir y distribuir sus bienes y servicios.
El ejecutivo , además, remarca que muchos empresarios están siendo cautelosos debido a que muchos invirtieron o tomaron créditos para la campaña navideña (que no fue buena: solo se vendió el 60% de lo estimado, a nivel de mypes) y como se quedaron con inventario, no han podido renovar su capital. Por lo que, ahora, no cuentan con mucho capital de trabajo para afrontar esta nueva campaña: la escolar.
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Roberto Ojeda, presidente del Gremio Pequeña Empresa de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), por su parte, afirma que la campaña escolar que da inicio formal en febrero está francamente en peligro: entre un 70% a 80% de esta se encuentra paralizada, a nivel de mypes, por la convulsión social y la crisis política.
“Hay mucha incertidumbre a nivel de mypes, que ya tienen el material comprado. En Gamarra y Mesa Redonda [que surten sobre todo a provincias en esta campaña] tienen las cosas complicadas, con horarios más cortos por las manifestaciones y sin poder enviar mercadería”, apunta. Esta temporada escolar es importante para ellas, representa el 20% de sus ventas anuales y suele mover S/1.300 millones.
En el emporio de Gamarra, precisamente, el proceso productivo de confecciones está totalmente detenido, reporta Susana Saldaña. presidenta de la Asociación empresarial Gamarra Perú, quien también indica que si la situación se extiende a febrero, la campaña peligrará.
“No solo se paralizó a nivel mayorista con los bloqueos, los compradores no han podido venir a abastecerse ni nosotros hacer envíos. De todo lo que producimos, casi el 60% se va a provincias”, precisa.
Normalmente, cuenta Saldaña, no solo llevan prendas terminadas, las mypes confeccionistas del interior se abastecen de telas e insumos para elaborar uniformes en diciembre y enero para así iniciar la elaboración en febrero. Además, entre febrero y marzo inician también el proceso de fabricación para el Día de la Madre, la campaña más importante del primer semestre.
Solo en Gamarra son alrededor de 1.500 talleres dedicados a la campaña escolar, pero en total son 5 mil mypes ligadas a ella, entre talleres, confecciones y servicios.
Recuerda que gran parte de las mypes de Gamarra se encuentran aún en recuperación, luego de la pandemia, y han tenido que asumir obligaciones económicas para participar de las campañas, como la de Navidad, que no tuvo los resultados esperados. Y ahora para la del retorno a clases.
Además, como indica Luis Antonio Aspíllaga, presidente del Gremio de Indumentaria de la CCL, los precios de los uniformes este año costarían alrededor de 30% en comparación del 2019, a causa de los mayores costos de la materia prima.
Mesa Redonda, en tanto, vive sus propias vicisitudes. Más allá de estar cerca al ‘punto cero’ de las protestas en Lima, no recibe la misma afluencia de sus compradores de provincias, en particular, del sur. Roberto Díaz, presidente de la Asociación de Importadores de Mesa Redonda, comenta que las regiones del país representan el 80% de todas sus ventas, mientras que el 65% de esa cantidad solía ir al sur. En particular a Puno y Tacna, donde los compradores también compraban para vender a los mercados de Chile y Bolivia.
“Durante este mes, apenas nos acercamos a la tercera parte de las ventas del 2019 y entre el 50% y 60% del 2022. Si no acaba esto, la campaña se va a retrasar y se acumulará mucho producto. O, incluso, podría irse al tacho”, afirma.
Además, menciona que muchos comerciantes- que tienen sus locales cerca al Congreso de la República o a la Av. Abancay en el Centro de Lima- prefieren no abrir sus tiendas los días en los que se programan marchas o cierran temprano, por lo que esa venta se anula. Aparte de los disturbios que se pueden generar, el empresario cuenta que también desanima a los compradores y vendedores el alto uso de bombas lacrimógenas-por parte de la policía- que está llegando a sus locales, a diferencia de protestas de otros años.
“Es abrumador, perjudica también la asistencia del público, los vendedores tienen que usar máscaras antigás. Así no se puede vender”, expresa.
Costo de la lista_ El valor de la lista, solo de útiles escolares, sin papelería ni uniformes, pasó de entre S/300 a S/350 del año pasado a S/400 a S/450 este año, de acuerdo a Arellano Consultoría. Con uniformes y textos escolares el valor total puede ser, en promedio, de S/800 a S/1.200 en total, acota Ojeda, de la CCL.
Consumidor mirará precios_ Ante el alza de precios de los útiles, la inflación y el contexto actual, el ejecutivo de Tai Heng sostiene que el consumidor busca la optimización de su presupuesto por lo que opta por productos más económicos. “Se buscan productos más accesibles, se dejan de comprar productos y se reusan otros, se ajusta en la calidad y se busca cuadernos con menos hojas”, detallan desde Arellano.
Normalmente, se espera que en Mesa Redonda el movimiento en campaña escolar sea de S/14 millones, afirma Ojeda, del gremio de la Pequeña Empresa de CCL. Este año, estima, “lo más probable, es que sea un 30% o 40% menos”.
En tanto, José Buendía, gerente de la División de Negocios de Mibanco, cuyo 20% de su cartera está en el sur, menciona que no todo está apagado. “Hay zonas que no están al 100% de actividad, pero están activas”, indica. En particular, en Lima y regiones en el norte. Actualmente, precisa el ejecutivo, solo un 8% de la cartera de Mibanco está comprometida en las zonas de mayor convulsión social como Juliaca, Puno y parte de Cusco.
¿Se retrasará la campaña?
El mejor escenario, en medio de toda esta crisis, sostiene Ojeda, sería tener una retraso de campaña, de unos 15 o 20 días. Pero dependerá del entorno político. Aunque, sin duda, “esto genere un hueco y debilite a la economía”, afirma.
En esa línea, desde Continental, Arti y Layconsa, en base a lo observado hasta ahora, avizoran que la campaña escolar podría retrasarse y empezar a finales de febrero o inicios de marzo, pudiendo ser una campaña más acotada e intensa. En particular en la zona sur del país y en las regiones más convulsas.
Hay zonas no muy afectadas y otras que sí, apunta Rosado, de Layconsa. “Cusco, Juliaca, Puno, Madre de Dios, Andahuaylas, son las zonas que hoy no tienen movimiento comercial, no abren, no tienen movimiento, mientras que hay otras que sí. En el norte te van a decir que están más optimistas porque no hay mayores paralizaciones y están desarrollando sus ferias. Esto va a influir en la campaña”, explica.
“Si Cusco, Tacna y Arequipa, en el sur, empiezan a reportar pérdidas, sí podemos tener problemas. En las otras regiones esperamos que no haya tanto inconveniente (...), aunque de repente empezarán a vender a fines de febrero”, comenta Salas, de Continental.
Asimismo, Hugo Guerra- García, gerente general de Arellano Consultoría, refiere que en zonas como el sur del país, los negocios ‘campañeros’, es decir, no tan arraigados con el negocio escolar, como puestos de mercado y los ambulantes son los más propensos a buscar otros negocios de rápida rotación y margen. “Por esto es que la incertidumbre de abastecimiento, de poder salir a vender, o del poder adquisitivo que tendrán los compradores entre enero y marzo, pueden hacer poco atractivo vender productos [de campaña escolar] ante el riesgo de atraso de la demanda o reducción de la misma”, explica.
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Mariano Morales, de Alpha (Tai Heng) comenta que, dentro de todo, hay una diferencia importante con las complicaciones de los últimos años para los fabricantes, y es que aunque hay incertidumbre, esta no pasa porque no se vayan a realizar las clases en las escuelas, como sí ocurría con el COVID-19. En la semana, desde el Ministerio de Educación (Minedu) reconfirmaron que las clases iniciarían el 13 de marzo.
La proyección inicial para el 2023 era acercarse al 90% del 2019 a nivel de valores o casi un 80% en volumen, detalla Guerra-García, de Arellano Consultoría. Dado el actual escenario de la campaña, en término de útiles escolares, precisa, podría hablarse de una pérdida de alrededor del 5% de la venta proyectada.
En campaña escolar _ Rodolfo Salas, gerente comercial de Continental (dueña de Standford, Conti y Utilex), sostiene que no se sabe cómo reaccionará el consumidor, pero intuye que cuando llegue la lista optará por comprar lo básico.
Presupuesto_ "Hay diferentes tipos de economía. Los sueldos no han crecido en la proporción a los costos de los productos, no solo en útiles, también de alimentos, por lo que es natural que el consumidor busque optimización del presupuesto", agregan desde Tai Heng.
“De mantenerse la situación estarían impactando sobre todo en la región sur, siendo álgida la situación para Puno, Madre de Dios y Abancay, donde podría llegar a hablarse de una campaña perdida”, estima el experto.
Por lo pronto, el presidente de la Fepcmac, Jorge Solís, alerta que en este momento ya se rompió la cadena de pagos, con una mayor incidencia en el sur de país.
Más productos_ Continental ha incorporado la categoría de libros didácticos y juegos didácticos para niños, que seguirán explorando.
Sin ferias _ Para esta campaña escolar, Continental- dueña de las marcas Standford, Conti y la cadena especializada 'retail' Utilex- no realizará sus ferias mayoristas hacia el consumidor. Aseguran que esta decisión se debe a que el equipo se ha reducido y se enfocarán más en la venta a distribuidores y tiendas.
Portafolio de Layconsa_ Por campaña, lanzan entre 20 a 25 SKU, básicamente enfocado en extensiones de líneas. Sobre todo en cuadernos, lápices de color, temperas y papelería.
Innovaciones en Tai Heng_ La compañía asegura que apuestan por consolidar su portafolio, ampliando algunos SKU y lanzando productos más accesibles, por ejemplo, con la marca Alpha, para afrontar el incremento de precios. Para una nueva categoría, afirma, no sería saludable por la coyuntura de precios y costos de materia prima.
Proyecciones HP_ Si bien hay mucha incertidumbre por la situación actual del país, HP optará por traer novedades y promociones que puedan ser más accesibles para el consumidor, sostiene Cecilia Bejarano, Channel Sales Manager de HP. Esta es la campaña más importante del año para HP, representa el 30% de sus ventas.