En medio de una realidad que hoy supera a la ficción, la pandemia ha puesto en jaque al mundo y, en el Perú, nos ha tenido más de ocho meses sin la vida tal cual la conocíamos.
Entre sus múltiples impactos, quizá uno de los golpes más duros lo recibió la industria del cine: desde salas cerradas que acumulan pérdidas semanales por S/16 millones, según la Asociación Nacional de Salas de Cine (Anasaci), hasta el suspenso en cuanto a estrenos y rodajes. No fue sino hasta el viernes pasado que el Gobierno anunció que como parte de la fase cuatro (que en un inicio se proyectaba a partir de agosto) de la reactivación económica, podrán retomar sus actividades con un aforo del 40%. Claro, siempre sujeto al cumplimiento de las condiciones necesarias y al control de la enfermedad.
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Desde julio, Cinemark y Cineplanet, las dos principales cadenas de cine del país, ya anunciaban a sus clientes que estaban próximos a presentar los protocolos de bioseguridad para reiniciar sus operaciones. Y que habían obtenido luz verde para realizar el mantenimiento de sus equipos de proyección.
“Nosotros venimos después de los ‘malls’ [en la fase 4]. Ahora estamos enfocados en dar mantenimiento a los equipos para que no se malogren”, comenta Diana López Chiu, gerenta de márketing de Cinemark.
¿Qué retos afrontarán para su regreso? En esta nota, publicada a fines de junio, cuando se anunciaba que la fase 4 daría inicio a partir de agosto (lo que finalmente ocurrió de forma gradual meses después), consultamos con especialistas y representantes de las cadenas de cine sobre cómo sería este proceso y las implicancias en el negocio. Acá la nota.
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EL RETORNO Y EL PROTOCOLO
Las cadenas que participan en este informe señalaban que el protocolo de bioseguridad para sus operaciones será presentado [en julio] como gremio, a través de la Anasaci. Y aunque aseguraban que el documento ya lo tienen preparado, preferían no adelantar mayores detalles hasta que sea presentado al Produce.
“Nosotros elaboramos nuestra propuesta, que incluye reducción de aforo y otros puntos, pero estaremos atentos a las observaciones del ministerio para saber cómo proceder”, sostiene Carlos Díaz, gerente general de Cinépolis en el Perú.
Definitivamente, agrega López Chiu, el distanciamiento social será importante “y el plus de los cines es que se puede controlar por la estructura de las salas”. Como gremio, cuenta, hacen esfuerzos para que la experiencia sea segura.
El aforo que plantearían, confirma Díaz, será de un 50% de las salas, que implica una butaca de distancia. Finalmente, el aforo aprobado este mes ha sido del 40% la semana pasada.
No obstante, para Tito Aguilar, profesor de posgrado de retail y entertainment marketing en ESAN, para mantener la distancia social de 1,5 metros se tendría que dejar una separación de tres butacas entre los espectadores, por lo que el aforo se reduciría al 30% de las salas.
“En algunos países empezaron incluso con el 20% de aforo y van aumentando de manera gradual”, asegura Aguilar, quien también fue gerente de márketing de Cinemark años atrás.
A este punto se sumaría la provisión de material de protección para el personal, alcohol, gel, fumigación y limpieza frecuente de las salas, personal para controlar el ingreso de los clientes, entre otros, agrega.
Los cines estaban trabajando con miras a agosto, pero Díaz comentaba que hasta ese momento no tenían aún una fecha exacta.
“La verdad no tenemos mucho optimismo, pero hay que confiar en que cumpliendo toda la normativa de seguridad, los clientes respondan”, indican desde Cinépolis.
Desde Cinemark, López Chiu remarca que la cadena no abrirá hasta la fase cuatro, midiendo primero cómo se controla la pandemia. “Somos conscientes de que somos un punto de encuentro entre muchas personas, es importante tener los lineamientos y protocolos establecidos para un regreso seguro”, enfatiza.
Para la Dirección del Audiovisual, la Fonografía y los Nuevos Medios del Ministerio de Cultura, lo principal es garantizar que la actividad se dé en condiciones seguras y reactivarla paulatinamente implicará la aprobación de protocolos específicos para cada eslabón de la cadena.
INDUSTRIA AFECTADA
“La industria ha sufrido un duro golpe y estamos tratando de apoyarnos”, sostiene el gerente general de Cinépolis, respecto a estos largos meses con salas cerradas y ventas nulas. Un fuerte impacto que podría durar dos años, estima Aguilar, pero que debería ser compensado por los últimos años del cine, que fueron espectaculares.
Cuenta el experto que, en la ultima década, el cine pasó de vender 24 millones a 50 millones de tickets por año y sólo en el 2019 la taquilla fue de S/463,1 millones, según data de Apoyo & Asociados. “Hay que surfear esta tormenta, al final habrá un renacimiento del cine”, confía.
¿Será suficiente para resistir a la pandemia y cerrar en azul? Omar Maldonado, director de Apoyo & Asociados, cree que sí, pero dependerá del poder de negociación que las cadenas de cine tengan con sus proveedores y cómo se adapten al nuevo entorno.
“Hay gastos que ahora [las cadenas de cine] están asumiendo sin estar operando, como alquileres (sobre todo en ‘malls’)”, señala. El objetivo para este año, sostiene, debería ser reducir las pérdidas y a partir del 2021 retomar los ingresos.
De acuerdo a Eduardo Herrera, socio de 7GI y ex gerente de Parque Arauco, los cines suelen pagar entre el 15% y 20% de su facturación por costo de ocupación. Un porcentaje que se tendrá que renegociar.
Para los meses que vienen, los cines saben que la lucha será sumamente dura, como expresa Diana López de Cinemark, y que todos sus planes deberán estudiar a esta coyuntura.
Cinépolis, por ejemplo, tiene la intención de reabrir todos sus complejos, pero son conscientes de que la pandemia avanza a distinto ritmo en cada localidad. En Pucallpa, donde tiene un cine, puede que tarde un poco más.
“Será difícil cerrar en azul este año. No sabemos cuál será la reacción del público”, indica Díaz.
“El objetivo para este año debería ser reducir esas pérdidas y que, a partir del 2021, se retomen los ingresos”, sostiene Omar Maldonado, director de Apoyo & Asociados.
En medio de la búsqueda de recuperar lo perdido, lo último que deberían mirar son los precios, afirma Aguilar. “Tendrán que asumir los costos [de los protocolos]”.
No obstante, sugiere que podría ser el momento de que los cines vean otras opciones, como solicitar la exoneración del 10% del impuesto municipal, renegociar porcentajes de las películas con las distribuidoras y verla posibilidad de revertir la ‘Ley canchita’. ¿Lo harán?
RETOS POSCUARENTENA
Pero el retorno del cine es más complejo que solo superar los protocolos y que se apruebe su reapertura, reflexiona Aguilar. Hay dos retos medulares que tendrán que enfrentar las cadenas. El primero será dar al consumidor la confianza de que el cine es un lugar seguro.
Si analizamos algunas encuestas (ver infografía), los peruanos –cuando estaban en cuarentena– no estaban muy convencidos de volver al cine. “Había mucha incertidumbre acerca de en qué porcentaje van a regresar, esto dependerá de que caiga la curva de los contagios. Yo estimo que al inicio será acotado”, explica Maldonado. Siendo ya diciembre, ¿este panorama habrá cambiado?
Desde Cinépolis, su gerente general mencionó que nadie tiene experiencia sobre esta situación. Por ello, mira con atención cómo se avanza en México, donde está su casa matriz, para hacerse una idea de cómo sería en el Perú. “La verdad es que no tenemos mucho optimismo, pero hay que confiar en que cumpliendo toda la normativa de seguridad, los clientes respondan. Además, hay que considerar que la situación económica se ha deteriorado y costará mucho salir adelante”, comentó a Día1.
Diana López, por su parte, está segura de que, cuando llegue el momento, cumpliendo la normativa y con la situación estará más calmada, se podrá restituir la confianza.
El ejecutivo cuenta que como industria (tanto exhibidores como distribuidores) se encuentran analizando estrategias para incentivar la demanda con una oferta de productos y precios atractivos. “Tenemos tiempo para evaluar”, dijo Díaz.
¿QUÉ CAMBIOS HABRÁ EN LA CARTELERA?
El otro gran desafío será cómo reacomodar la cartelera, ya que ante el cierre de los cines muchas películas han pasado para el 2021. “Será importante la negociación entre el exhibidor y la distribuidora. Si antes estrenabas 3 o 4 a la semana, ahora serán 1 o 2 y buscarán que sean estrenos que permitan compensar”, proyecta Aguilar.
Por supuesto, dependerá también de cómo sea la respuesta del público, “si es lenta, las distribuidoras podrían aplazar más estrenos”, refiere Maldonado.
“Lo que sí es seguro es que para el 2021 se acumularán muchos estrenos y los actores de la industria tendrán que negociar mucho para obtener buenas fechas”.
A nivel de fechas, López Chiu explica que los estrenos están marcados por EE.UU., donde ya algunos cines de Cinemark están abriendo de a pocos. “Yo creo que a partir de ahí se irán acomodando los estrenos, ya hay películas confirmadas. Más adelante tendremos un panorama más claro”, afirmó en ese momento.
En Cinépolis, están pendientes del reacomodo día a día. pero también habrá que ver el tema de las distribuidoras, ya que ellas necesitarán publicitar las películas y todo aún es confuso en este momento.
Lo que es seguro es que para el 2021 se acumularán muchos estrenos y los actores de la industria tendrán que negociar mucho para obtener buenas fechas. Los grandes estudios, explica Aguilar, tendrán mayor poder de negociación que los independientes y que el producto local, que serán los principales sacrificados.
“En nuestro caso, todos nuestros estrenos pasarán para el próximo año. Y creo que lo mismo harán todas las películas peruanas. Yo no pondría una cinta local, si es que la reapertura será con menos aforo, sería sacrificarla”, afirmó Sandro Ventura, director de Big Bang Films, productora de No me digas solterona 2, que iba a estrenarse en abril.
Un impacto que afectaría al cine peruano, que este año tuvo dos meses y medio auspiciosos en estrenos comerciales y consiguió una asistencia de más de 2,3 millones de espectadores antes de la pandemia, según indica DAFO del Ministerio de Cultura a Día1.
Los retos que vienen para la industria, rumbo al reestreno, no son pocos. Aún les queda tiempo.
DATOS
- El 50% de la venta de entradas se da por canales digitales en Lima Metropolitana, según la consultora Sinergia Latam. En esa línea, Cinépolis lanzará su aplicativo móvil y Cinermark potenciará este canal.
- Cinemark junto a Big Bang realizan concurso de cortometrajes a través de redes sociales.
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