El impacto del COVID-19 no parece dar tregua todavía, ni a nivel de contagios ni a nivel económico. La Organización Internacional de Trabajo (OIT) ya señala que Latinoamérica es la región que más empleos ha perdido a causa de la crisis y que podría alcanzar los 41 millones de empleos caídos a fin de año. Solo de marzo a mayo, el INEI reportó que en Lima se perdieron más de 2,3 millones puestos de trabajo por los efectos de la crisis.
En esa línea, la consultora Global Research Marketing (GRM), realizó una encuesta durante la última semana de junio, para monitorear la situación laboral y expectativas de los limeños. De acuerdo al reporte, el 60% de limeños asegura que hoy no cuenta con empleo, ya que –en la mayor parte de los casos– fueron despedidos o se encuentran en suspensión perfecta de labores (que ahora se extendió hasta el 8 de octubre). (Ver infografía)
MIRA: Más de 2,3 millones de personas perdieron su empleo en Lima Metropolitana entre marzo y mayo, según INEI
Un 17% señala que ha sido enviado a casa por licencia sin goce de haber y un porcentaje menor bajo el concepto de vacaciones.
“Lo complejo también es que no hay mayores posibilidades de recolocarse rápidamente. Esta situación, al parecer, solo es el comienzo, y conforme transcurran los siguientes meses, la crisis y el desempleo se agudizará, propiciando incluso un incremento del sector informal por la gran necesidad de generar ingresos”, sostiene Giuliana Reyna, gerenta general de la consultora.
Como efecto de esta situación, hace sentido que un 60% de encuestados también afirme que sus ingresos se redujeron bastante durante la cuarentena social.
Y aunque el impacto del coronavirus ha sido transversal, esta crisis sanitaria ha mermado, en mayor medida, los ingresos de los más jóvenes, aquellos trabajadores de entre 18 y 35 años. Así como a los limeños de bajos recursos, en particular del segmento D, quienes aseveran en su totalidad que sus bolsillos han sido afectados.
En retrospectiva, en marzo, el 44% de los encuestados pensaba que el impacto del coronavirus en la economía sería severo. No obstante, a medida que avanzó la cuarentena y esta se amplió , en junio, el 65% afirma ahora que el efecto que se vive está siendo muy alto.
En palabras de Reyna, hasta fines de junio, el 58% de entrevistados considera que esta crisis y los efectos de la pandemia podría tener una duración de entre uno a dos años. No obstante, aún no existe certeza alguna de cuándo ni cómo tendrá punto final esta pandemia.
“Por lo pronto, los consumidores están evidenciando una alta disposición a reducir gastos en general”, refiere.
La preocupación por contagiarse tampoco se ha reducido. De acuerdo a GRM, más del 60% de los encuestados manifiesta que se siente algo o muy preocupado por contagiarse de la enfermedad.
PERCEPCIÓN DE LAS EMPRESAS
Ante las distintas quejas de los usuarios sobre el accionar de ciertas marcas que subieron precios de material sanitario, de medicamentos, de productos de primera necesidad, que presentaron demoras o ausencia de entregas en sus compras, entre otras protestas que ha develado la crisis, los consumidores se han quedado con muchas sensaciones encontradas.
Por esa razón, ante la consulta de qué mejoras podrían implementar las empresas, el 66% de consultados por la consultora GRM señala que lo primero que deberían hacer es mantener los precios de y no subirlos. En segunda instancia, también hace falta mejorar en responder a tiempo los reclamos y solucionar los inconvenientes que se presenten. Brindar ayuda a los más necesitados también es un punto que el consumidor pide a la empresa.
“Los consumidores seguramente no perdonarán a aquellas marcas con las que se sientan defraudados y decepcionados, por ese motivo es que desean marcas más solidarias, que no los abandonen y mucho menos que se aprovechen de la crisis sanitaria, económica y humanitaria para incrementar sus precios, esto será fuertemente castigado y generará un gran rechazo por parte del consumidor”, explica Reyna. Según analiza, esta situación dejará una gran huella en el tiempo para los limeños.
DATOS
1_ Percepción de desempleo
El 47% de los limeños entrevistados indica que el nivel de desempleo en el país está siendo alto y el 35% afirma que ya es severo.
2_ Preocupación
En marzo, el 46% de encuestados señaló que se encontraba muy preocupado por la crisis del coronavirus. En junio, esa cifra llegó al 64%.