Dynacor Gold Mines inauguró en octubre pasado su segunda planta de refinación de oro en el Perú, Veta Dorada (Chala), con la que espera convertirse en el primer acopiador y refinador local del metal dorado.
La planta de US$16 millones procesará, en una primera etapa, 300 toneladas diarias de mineral proveniente de labores artesanales del sur del Perú y regiones distantes. "Dynacor no compra nada de mineros informales, sino de pequeños productores que siguen el proceso de formalización”, apunta Jean Martineau, presidente y CEO de la minera canadiense.
Esta acopia desde hace veinte años el mineral explotado por productores artesanales del sur peruano, para procesarlo en su planta de Ayacucho (Huanca) y convertirlo en lingotes de oro y plata, que exporta a Suiza.
La adición de la planta en Chala (Arequipa) triplicará su producción corriente cuando alcance su máxima capacidad de diseño, de 600 toneladas diarias. Actualmente, Dynacor es el segundo refinador local de oro después de Laytaruma, pero espera superarla en pocos meses.
Martineau estima que Veta Dorada beneficiará, cuando menos, a 200 productores artesanales de oro y sus familias.
El ejecutivo remarca que estos deben cumplir rigurosos requisitos para convertirse en proveedores de Dynacor, entre ellos, estar inscritos en el Registro de Saneamiento del Ministerio de Energía Minas.
Exploración de oro
Además de sus dos plantas de refinación, Dynacor posee un proyecto de exploración, que financia con los ingresos de la refinación aurífera.
“En los últimos cinco años, hemos obtenido US$29,5 millones en beneficios netos, de los cuales hemos reinvertido US$15 millones en la exploración de Tumipampa (oro)”, declaró.