Las medidas de aislamiento social decretadas tras la llegada del nuevo coronavirus, llevaron a que estudien de manera remota tanto los que confiaban en la educación a distancia como los que no.
Esta situación favoreció a un nicho del mercado educativo: las plataformas que ofrecen cursos en línea y de corta duración, como Netzun y Crehana.
Juan Carlos Solidoro, CEO y cofundador de Netzun, señala que en lo que va del segundo semestre del 2020 han tenido un crecimiento 10 veces mayor que en similar periodo del año pasado. Asimismo, menciona que en los primeros seis meses del año versus los del 2019 registraron ventas ocho veces mayores.
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Solidoro indica que los cursos más demandados en los últimos meses son los relacionadas a las habilidades técnicas. “Entre estos, destacan los cursos de Excel básico hasta avanzado, así como Photoshop e Illustrator que son más de diseño. También hay una demanda de temas relacionados a marketing y negocios. Finalmente, están las habilidades blandas. Ha crecido mucho la demanda de cursos como presentaciones efectivas, trabajo en equipo y comunicación”, agrega el CEO de Netzun.
Por su parte, Diego Olcese, fundador y CEO de Crehana, afirma que de febrero a agosto del 2020 la demanda de cursos en todo Latinoamérica creció en 191% y en el Perú, en 212%.
Los cursos más solicitados por los usuarios de Crehana en Latinoamérica son “Descubre la locución”, “Adobe Phtoshop CC desde Cero: Experto en diseño gráfico”, y “Dibujo a Lápiz: De principiante a experto”. En el Perú, destacan “Adobe Photoshop CC desde Cero”, “Marketing digital para negocios” y “Descubre la locución”.
PÚBLICO
El público también ha cambiado. Si bien en Netzun el 60% de su público sigue siendo usuarios de entre 22 y 35 años con educación superior, hay un sector muy reducido, conformado por personas mayores de 35 años, que está creciendo a raíz de la pandemia.
Los estudiantes de Crehana, según el CEO de la empresa, son principalmente creativos, freelancers y emprendedores. Sin embargo, indica que la pandemia les ha permitido llegar a nuevas personas, de los cuales algunos están buscando desarrollarse en otras áreas que no necesariamente están relacionadas con su trabajo o estudios.
Una de las razones que ha despertado el interés en ese segmento, según los representantes de Netzun y Crehana, es que algunos han perdido sus empleos por la crisis económica y buscan adaptarse a los perfiles que requieren actualmente las empresas.
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INSTITUTOS
Polidiomas y el Instituto Peruano de Publicidad (IPP) ofrecían cursos de manera presencial hasta antes de la pandemia. La coyuntura los llevó a reinvertarse ofreciendo cursos virtuales. Ambas instituciones señalan que el cambio fue para bien.
Roberto Chocano, director académico del IPP, resalta que con los cursos virtuales han descubierto que pueden atender a alumnos del extranjero y de provincias.
“Hemos tenido el caso de una chica que se ha inscrito desde Guatemala. Tenemos también chicos que se han inscrito desde provincias, que es algo que antes no sucedía. Es una nueva oportunidad tanto para los estudiantes como para el instituto”, afirma Chocano.
Asimismo, menciona que el público al que se dirigía el IPP ha cambiado con la pandemia y con las crisis económica que se generó tras la llegada del coronavirus al Perú.
“Algunos de nuestros alumnos tienen la misma perspectiva que tenían cuando asistían presencialmente, que era adquirir nuevas habilidades y conocimientos para mejorar su inserción laboral. Hoy en día los cursos de corta duración son una alternativa para insertarse laboralmente después de haber perdido sus trabajos y además, porque tienen clarísimo que la virtualidad ha venido para quedarse”, indica Chocano.
A su turno, María José Montes, country manager de Polidiomas para el Perú, cuenta que la metodología que aplicaban para enseñar idiomas exigía que las clases sean siempre presenciales. Las clases podían desarrollarse en alguna cafetería o en algún otro lugar, en el que se reunían grupos pequeños de estudiantes con un profesor. Cuando llegó la pandemia, cambiaron el modelo de negocio de presencial a completamente virtual.
“Nuestro gran temor era que podíamos tener una reacción negativa por parte de los estudiantes y que nuestra metodología social no funcione, ya que no estábamos en una cafetería, en un espacio natural. Sin embargo, al poco tiempo nos dimos cuenta que los mismos alumnos retomaron las clases de manera online teniendo muy buenos resultados”, señala Montes.
Desde el inicio de la cuarentena hasta la fecha, las matrículas crecieron en un 48% y la asistencia a los clases pasaron de 85% a 95%. Montes considera que el aumento de alumnos matriculados responde a que la incertidumbre económica y laboral exige a los profesionales diferenciarse del resto, y una buena manera de hacerlo es aprendiendo un segundo o tercer idioma.
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