Hace 10 años, tras asistir a un Laboratorio de Fabricación Digital (Fab lab), en donde investigó la aplicación de la tecnología para la elaboración de distintos objetos, Vaneza Caycho, CEO&co-fundadora de iFurniture, dio inicio a lo que más tarde se convertirla en su propio emprendimiento.
Tras asistir a un Laboratorio de Fabricación Digital (Fab lab) en el 2011, donde investigó la aplicación de la tecnología en la fabricación de objetos, consiguió ganar media beca para asistir a un diplomado en Lima de The Fab Foundation, una organización sin fines de lucro que nace del programa Center for Bits & Atoms del Fab Lab MIT.
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Caycho ganó media beca para un diplomado en Lima de The Fab Foundation, una ONG que nace del programa Center for Bits & Atoms del Fab Lab del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT). Así, durante seis meses investigó tecnologías aplicadas a la construcción de productos hechos de madera y las aplicó en su tesis final: una mesa en forma de llanta con teclas de piano, luces, sonidos y una tarjeta electrónica.
Su diseño tenía, entre otros objetivos, el hacer posible que niños aprendan a tocar este instrumento. “Cuando fuimos a Barcelona para graduarnos habían elegido mi proyecto como uno delos 10 mejores del mundo”, menciona la co-fundadora de Fab Women en Perú y Latinoamérica, organización que busca promover la igualdad de género en el sector.
Con ese impulso, en el 2014 fundó oficialmente iFurniture y postuló en el 2018 a Startup Perú, iniciativa de Prolnnóvate del Ministerio de la Producción, donde ganó como el mejor modelo de ‘startup’.
Esto impulsó el ingreso de iFurniture en los modelos de plataformas de intermediación, que conectan distintos productos y servicios con la demanda. Esto le permitió conectar al diseñador del mueble, al fabricante y a quien busca comprarlo. Es decir, un modelo ‘three-sided marketplace’. Actualmente, cuentan con una red de 45 diseñadoras capacitadas en madera y 3 carpinteros con quienes trabajan los pedidos.
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Por la pandemia, expandieron su modalidad de venta directa para incluiría venta corporativa enfocada principalmente en universidades. Así, distintas casas de estudio como la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, la Universidad Continental y la Universidad Agraria han sido su s clientes. “Antes de pandemia, podíamos tener ventas de más o menos entre US$1.000-US$1.500 al mes. Pero los últimos 3 años hemos tenido 3 picos altos de ventas corporativas con los que hemos llegado a un ticket de venta de hasta US$3.000 por mes”, comenta Caycho.
Proyecciones al 2022
Aunque la pandemia y la fluctuación del dólar han encarecido los materiales -antes una plancha de madera podría conseguirse en S/1OO y ahora puede estar entre S/125 y S/150-, iFurniture busca ampliar sus operaciones para el 2022 a tres países: Estados Unidos, Chile y Brasil.
“Volvemos al propósito de siempre: levantar la industria de la carpintería. Eso significa dar trabajo a los carpinteros y que haya más carpinterías digitales”, comenta la arquitecta.
Una líder a nivel mundial
- Ganadora de la primera edición del Women Entrepreneurship Award en el APEC SME Taiwan 2018.
- Ganadora del Primer Fab Award en el2021 como co-autora del trabajo de lnvesugación “Integración de mujeres en el ecosistema de fabricación digital”.