Durante el año pasado, antes de que la pandemia del COVID-19 asolara al mundo, la ciudad de Arequipa recibía más de 2 millones de turistas y generaba ingresos que superaban los S/1500 millones en actividades turísticas, hospedaje, restaurantes y afines. A raíz de las restricciones necesarias para controlar la propagación de la enfermedad, gran parte de la región characata tuvo que permanecer con cuarentena focalizada hasta el 1 de septiembre. Solo cuatro ciudades siguieron con esta restricción hasta finales del mes pasado.
Contenido sugerido
Contenido GEC