¿Puede hablarnos sobre su plan de jornadas semanales más cortas?
Las semanas laborales más cortas son una solución a los cambios en la civilización. Históricamente, cuanto más avanza la tecnología y más progreso hay, menos trabaja la gente. Lo que está sucediendo ahora es que la gente vive más tiempo, con mejor salud y menos desgaste físico. Esta civilización exige más conocimiento, más experiencia, menos esfuerzo físico.
La productividad ha aumentado exponencialmente aunque algunos economistas lo nieguen. Y esa es la razón por la que el desempleo es un gran problema en muchos países, pero más específicamente en Europa. Es importante que las personas no se jubilen a los 50, 60, o 65 años de edad. Creo que la gente debe retirarse después, porque va a tener más conocimiento y experiencia. Y pienso que debería trabajar tres días a la semana, para que se abra espacio para otros.
De esta manera, habría menos necesidad de transporte. Los países no tendrían que hacer frente a las jubilaciones anticipadas que desestabilizan las finanzas. La calidad de vida y tener cuatro días libres por semana alentaría una gran cantidad de actividades económicas: más turismo, entretenimiento, deportes, cultura y educación.
¿La gente ganaría menos de esta manera?
No, creo que las empresas que pueden adoptar esta propuesta son aquellas en las que la productividad ha generado un exceso de personal. Es un gran cambio tener menos días de trabajo y más años de actividad hasta la jubilación. De hecho, empezamos esto en Telmex (la división de telefonía fija de América Móvil) hace un par de años. Estamos ofreciendo a la gente que tiene mucho conocimiento permanecer más tiempo y trabajar menos días.
¿Y cuál ha sido la respuesta?
Alrededor del 40% acepta la oferta.
¿Existen industrias en las que un cambio así se adaptaría más fácilmente?
En las industrias donde hay demasiado personal, como las agencias gubernamentales. En lugar de recortar personal, se puede implementar un programa así, en el que se puede tener más gente, tal vez pagar más salarios, pero se evita tener que pagar cuando los trabajadores se jubilan anticipadamente. Si yo fuera cualquier trabajador de Telmex, me habría jubilado hace 22 años.
El cambio en esta propuesta es una jubilación más corta, ¿y luego qué pasaría?
Si nos fijamos, ha sido lento, pero con el tiempo las personas han estado trabajando menos. Antes trabajaban 72 horas, seis días a la semana. Luego 60 horas. El gran éxito fue la semana laboral de 48 horas. Después la semana inglesa, en la que se trabajaba el sábado y solo se descansaba el domingo. Después vino la semana de 40 horas. En lugar de trabajar cinco días, por 35 horas, trabajemos tres días para que otros también puedan trabajar.
¿Cómo convencer a la gente de que acepte esto, si la sociedad capitalista nos dice que cuanto más se trabaja, más lejos llega uno?
Si quieres trabajar más, puedes hacerlo. Puedes tener dos empleos: uno de lunes a miércoles y otro de jueves a sábado. Esa es una opción. Otra es trabajar tres días y capacitarte en algo en los otros días para conseguir un mejor empleo.
Usted se reúne con gente importante todo el tiempo. ¿Ha promovido esta propuesta?
No, solo lo he hecho público, pero no es una decisión por decreto. Tiene que suceder gradualmente. Supongamos que la mitad de los empleados de Telmex sobraran. Sería una gran solución: la mitad trabajaría de lunes a miércoles, y la otra mitad de miércoles a sábado. Se tendría un horario completo, servicio 12 horas al día, 6 días a la semana. Y la gente se jubilaría a los 75.
Cada vez más, menos gente trabajaría en oficina. Vamos a tener automóviles sin conductor que reducirán el número de vehículos y la contaminación. Los estacionamientos tendrán nuevos usos, porque ya no los usaremos tanto. Es más fácil generar riqueza con menos personal y menos costos.
Hemos hablado de las consecuencias positivas. ¿Hay alguna negativa?
Hay resistencia a todo cambio. El cambio más profundo es esta nueva civilización. Esta nueva civilización cambia de una sociedad industrial a una de servicios. Todavía hay algunos políticos que alaban la importancia de la producción industrial. Pero se olvidan que esta es una sociedad de servicios. ¿Has visto “Modern Times” con Charlie Chaplin? Él era parte de la máquina que fue desplazada por la robótica. No solo se fabrican productos en otros países, sino que también se producen con máquinas. Así que el trabajador ya no es parte de la máquina, sino que es un director y organizador de máquinas.
El cuarto hombre más rico del mundo propone reducir la jornada laboral a tres días a la semana. El empresario ya está implementando esta medida en sus firmas.
“Es más fácil generar riqueza con menos personal”
Presidente emérito de América Móvil
Carlos
SLIM
Entrevista
Slim: “Estamos ofreciendo a la gente que tiene mucho conocimiento permanecer más tiempo y trabajar menos días”.
bloombergPatricia Laya