José Gallardo Ku, exministro de Transportes y Comunicaciones entre el 2014 y el 2016, es uno de los coautores del libro “Propuestas del Bicentenario, rutas para el desarrollo regional”, elaborado por Videnza Consultores. En su participación explica las fragilidades estructurales que tiene nuestro país, especialmente en la conectividad de infraestructura de transportes y digital entre las regiones del Perú. En esta entrevista se adentra en la problemática y pide que las nuevas autoridades regionales centren sus esfuerzos en cerrar las brechas del sector.
LEE TAMBIÉN | Perú es el tercer país de la región que importa más carne de pollo de Brasil: ¿Seguirá subiendo su precio?
—Usted indica que el Perú tiene potencial para conectar provincias con la urbe y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos a partir del cierre de brechas de infraestructura social y digital. ¿Qué es lo que se necesita para lograrlo?
En el Perú vas a encontrar sistemas de corredores que podrían interconectar las ciudades y regiones , y generar un sustento para los ciudadanos, pero no se logra. No hay especialización y no hay infraestructura que genere esa mejor calidad de vida. La infraestructura debe reducir los tiempos de viaje, la calidad de viaje entre ciudades, la dimensión urbana y la inserción de provincias.
—¿En la práctica cómo se logra ello? ¿Adjudicando más obras públicas y Asociaciones Público Privadas (APP)?
Para incidir en el ámbito regional hay que hacer que la inversión pública sea más productiva. Por ejemplo, con postas médicas. Si bien por dimensiones de algunas localidades no se puede tener a los profesionales, los debemos conectar con infraestructura física, de telecomunicaciones con fibra óptica. Así los podemos conectar con otros especialistas y brindar servicios de teleconsulta. También se debe interconectar los servicios de transporte masivos: los aeropuertos con el tren eléctrico y los metropolitanos.
—Es fácil decirlo en la teoría, pero no hace falta ser muy perspicaz para darse cuenta de que el actual Gobierno tiene problemas para adjudicar obras públicas de gran envergadura, principalmente con las APP. Entonces, ¿cómo se puede plantear este tipo de cambios?
El Gobierno va en el camino opuesto a lo que dice el libro.
ENCUENTRA EN ECONOMÍA | Inflación en el Perú: ¿Qué productos de la canasta básica familiar continuarán al alza?
—Por ejemplo, el exministro de Transportes y Comunicaciones, Luis Barranzuela, propuso que se puedan intervenir los contratos de concesión, para que se puedan ver los contratos de peajes unilateralmente. Esta fue, además, una propuesta de campaña de Pedro Castillo. Especialistas advirtieron la inconstitucionalidad de la propuesta y el daño que generaría en la confianza de los empresarios. ¿Cómo recuperar la confianza?
Es una idea con poco sustento y que va en contra del desarrollo. El libro reconoce la dinámica urbana, la alta especialización que hay en las urbes y trata de establecer vínculos a través de las inversiones de infraestructura y telecomunicaciones. Así generas un dinamismo urbano hacia las regiones. Mundialmente está reconocido que los mejores especialistas están en las urbes y eso es lo que se debe priorizar para llevar a regiones a través de políticas públicas.
—Ese dinamismo solo se puede lograr, según indica, mejorando la conectividad a Internet y el acceso a infraestructura pública en las regiones. ¿Cómo dinamizar el proceso de contrataciones con el Estado?
Recomendamos afinar el proceso de otorgamiento de concesión para que en las últimas etapas no se vaya en contra de las cláusulas contractuales. Muchas veces nos damos cuenta de que una concesión va a tener problemas cuando se acaban los estudios definitivos de ingeniería y se encontraron errores al momento de licitar o de calificar las tierras. Para ese momento pasaron dos años desde el otorgamiento de la concesión. Entonces proponemos que la función de Proinversión como líder de los procesos de APP y de proyectos de inversión no culmine al nivel de adjudicación, sino hasta el nivel de verificación de condición de los terrenos. También debería creársele funciones explícitas al Plan Nacional de Infraestructura para que sea más ordenado el proceso de adjudicación de obras. Que sea una unidad de planeamiento y despliegue de infraestructuras no solo en Lima, sino en provincias.
LEE TAMBIÉN | MEF deberá frenar medidas populistas, anotaron gremios
—¿Entonces habría que generar más carga burocrática en los procesos de concesión?
Sí, para asegurar que no hay colusión, que no hay problemas en el contrato o en los estudios finales. Es agregar un paso más a la burocracia previa y a veces es necesario porque en el país los temas de corrupción son muy repetitivos.
—El Gobierno anunció la actualización del Plan Nacional de Infraestructura para junio, pero este se retrasó. ¿Qué tipo de contratación deberían priorizar?
El Gobierno necesita pensar en la construcción de infraestructura como una herramienta para incrementar la competitividad. El Perú está en un entrampamiento institucional que hace que reduzca sus capacidades y por ello ahí tenemos que conceptualizar lo que hay que hacer. Generar políticas públicas dentro de tecnología especializada. El libro se hizo para apoyar con ideas al proceso de elecciones de autoridades regionales, para que tengan idea de dónde pueden apuntar.
ENCUENTRA EN ECONOMÍA | Ministro Kurt Burneo rebaja proyección de crecimiento de la economía peruana de 3,6% a 2,2%
—Los gobiernos subnacionales también tienen constantes problemas con la corrupción al momento de adjudicar obras. ¿Cómo lograr que sean mejores?
Los esfuerzos que hacemos son para que la descentralización de recursos valga la pena. Si un gobierno local estándar no pone en la mesa mejoras a los bienes públicos, no mejora.
—¿Y cómo formamos cómo mejores funcionarios públicos?
El mayor error es que cuando algo no funciona no se corrija ni mejore. Cuando en obras públicas hubo paralizaciones se quedaron ahí. Las autoridades tienen que entender que tienen una gran responsabilidad con su población y que pueden cambiarle la vida a las personas.