La recuperación del mercado laboral para las mujeres en Lima Metropolitana ha ido de la mano con un incremento en los niveles de precarización del trabajo.
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La recuperación del mercado laboral para las mujeres en Lima Metropolitana ha ido de la mano con un incremento en los niveles de precarización del trabajo.
Aunque la población económicamente activa (PEA) femenina ocupada supera levemente los niveles prepandemia, esta situación fue impulsada principalmente por un mayor crecimiento del subempleo –personas que trabajan menos de 25 horas o con ingresos menores a la canasta mínima de consumo– y no del empleo adecuado.
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Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), en el primer trimestre del año había casi 866.000 mujeres con empleo adecuado, superando la cifra del mismo período del 2021 (casi 661.000), pero no a la del 2019 (1.048.000).
En cambio, las mujeres subempleadas durante el primer trimestre del año superaron los 1,3 millones, cifra mayor a los 1,1 millones de subempleadas en el mismo período durante el 2019.
En enero de ese año se registraron 77.000 mujeres subempleadas. Sin embargo, actualmente dicha brecha se ha ampliado y asciende a 456.000.
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Este aumento en el subempleo tiene que tomar en cuenta el incremento general de la informalidad, indicó Cristina Oviedo, socia del estudio Payet, Rey, Cauvi, Pérez Abogados.
Otro factor que explica la situación de las mujeres, detalló, es la dificultad que presentan para incorporarse al trabajo formal, dado que “no hay políticas para apoyar, por ejemplo, el cuidado de los hijos. [No hay] políticas que realmente funcionen”, agregó.
Asimismo, indicó que un tercer factor es el impacto de la pandemia en las micro y pequeñas empresas (mypes). “Las mujeres principalmente trabajaban en mypes”, acotó.
Adicionalmente, Germán Lora, socio de Damma Legal Advisors, consideró que la pérdida del empleo de las mujeres durante la pandemia se debió a las obligaciones que tienen en sus hogares.
En contraste, entre la población masculina el empleo adecuado viene recuperándose más rápido.
312 mil mujeres buscaron activamente un empleo en el primer trimestre del 2022, de un total de 511 mil personas en la capital.
De acuerdo con el INEI, entre el primer trimestre del 2022 y el mismo período del 2021, la cifra de jóvenes entre 14 y 24 años que tenían empleo había crecido un 31,1%. No obstante, este dato se encuentra 3,6% por debajo del primer trimestre del 2019.
Asimismo, entre enero y marzo, se registraron 270.800 jóvenes con empleo adecuado, 27,2% menos que similar período del 2019.
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De acuerdo con Germán Lora, el crecimiento del empleo con respecto al 2021, tanto en jóvenes como en mujeres, se debe a un efecto rebote por la reactivación de las actividades económicas.
Precisó que en el caso del empleo juvenil, la falta de experiencia ha llevado a que aún no se recupere el empleo adecuado en este segmento de la población, puesto que las empresas han optado por contratar a personal con mayor cantidad de años de trabajo.
Oviedo agregó que las medidas del Gobierno en favor de impulsar el empleo juvenil no han ido acompañadas de incentivos para las empresas. Añadió que programas como Trabaja Perú –ahora llamado Luwari Perú– son medidas que ayudan de forma temporal.
La tasa promedio de desempleo en el primer trimestre del 2022 fue de 9,4%, la más alta en seis meses.
En mujeres, el desempleo fue de 12,5%, mientras que en los hombres la cifra llegó a 6,8%, según INEI.
El desempleo femenino actual (312.000) es menor que en el primer trimestre del 2021 (388.000), pero supera la cifra registrada en el mismo período del 2019 (236.000).
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