Se sabe que la transformación digital en el sector financiero ha ingresado con propuestas atractivas para todos los usuarios. No obstante, el cambio de divisas a través de una página web o una app puede generar desconfianza ya sea al público empresarial o particular.
Sin embargo, ¿salir con el dinero a la vía pública no resulta más peligroso? Sería cuestión de evaluar los factores de riesgo que asume el cambista (o casa de cambio física) y el usuario en una ciudad donde la inseguridad ciudadana es el pan de cada día.
MIRA | “No es normal que el gerente general de Petro-Perú despache con el presidente de la República”
Javier Pineda, CEO de Billex, plataforma digital peruana que -a través de un fideicomiso- conecta a personas y empresas para comprar y vender dólares, revela los mitos más comunes sobre realizar operaciones de cambio de divisas y las verdades detrás de cada uno de ellos.
MITO #1: “No es seguro, no encuentro garantía que me llegue el dinero”
Verdad: Las ‘fintech’ de cambios de divisas que trabajan aliadas a entidades financieras como bancos y obtengan una suscripción con un fideicomiso, como el caso de Billex, evita al 100% que el dinero se pueda perder durante la transacción.
MITO #2: “Demora mucho más que una casa de cambio tradicional”
Verdad: La propuesta de muchas ‘fintech’ dedicadas al cambio de divisas es realizar la transacción en minutos, Billex por ejemplo, lo realiza en un margen de 30 minutos inclusive a cuentas en otros bancos.
LEE TAMBIÉN | ¿Qué beneficios brindarán las entidades financieras al operar 100% digital?
MITO #3: “Cobran costos adicionales al tipo de cambio”
Verdad: El tipo de cambio negociado es el costo final que se deberá asumir, no deben existir cargos adicionales a la operación.
MITO #4: “No tienen un precio competitivo”
Verdad: Todas las ‘fintech’ de cambios de divisas compiten con un tipo de cambio competitivo que puede ser muy similar o mejor a la de un cambista o casa de cambio física.
MITO #5: “No recibes una atención personalizada”
Verdad: El servicio al cliente no se deja a un lado en este tipo de negocio. Por el contrario, es trabajo del día a día fidelizar a la mayor cantidad de clientes para que siempre piensen en regresar y exista una frecuencia segura en las operaciones. Es por ello que la atención uno a uno fue uno de los gatilladores más importantes para el crecimiento de Billex.