Los precios del níquel trepaban el lunes a su máximo en más de un mes, después de que la compañía minera Vale recortó su objetivo de producción anual para el ingrediente del acero inoxidable por el impacto de la pandemia de coronavirus.
A las 1125 GMT, el níquel referencial en la Bolsa de Metales de Londres (LME) operaba con un alza del 2,6%, a US$12.350 por tonelada, tras subir antes a su cota más elevada desde el 16 de marzo, a US$12.440.
“El recorte de producción de Vale respaldó al mercado, pero el cierre de minas no es demasiado nuevo, ya que sabíamos que algunas lo harían”, dijo Daniel Briesemann, del Commerzbank. “El impacto negativo del virus es más grave para la demanda y el mercado podría quedar bastante sobreabastecido este año”.
Vale, uno de los principales productores mundiales de níquel, rebajó su previsión de extracción para el metal en 2020 a 180.000-195.000 toneladas desde 200.000-210.000, excluyendo su unidad en Nueva Caledonia, por el impacto de la pandemia.
La japonesa Sumitomo Corporation también cerró una mina de níquel en Madagascar, mientras que otro gran productor, Filipinas, suspendió los trabajos en algunas explotaciones para frenar la propagación del virus.
La demanda de níquel mejoró levemente en marzo, gracias a la reapertura de la economía en China. Pese al aumento de los recortes de suministro, un sondeo de Reuters mostró que se espera que el mercado del níquel registre un superávit de 89.000 toneladas este año.
En otros metales básicos, el aluminio en la LME caía un 1%, a US$1.491,50 la tonelada; el cobre perdía un 0,5%, a US$5.186; el zinc cedía un 0,4%, a US$1.950; el plomo operaba estable a US$1.673; y el estaño subía un 0,9%, a US$15.205.