Un nuevo capítulo se abre para minera Volcan, otrora empresa emblemática de la sierra central, ahora bajo la batuta del grupo argentino Integra Capital, el cual coge la posta del gigante suizo Glencore, en un contexto “bastante desafiante”.
Y es que la tarea que la rioplatense tiene por delante no es para nada fácil.
MIRA | Volcan: bonos de empresa minera caen luego que Glencore vendiera su participación
Esto, debido a que “está asumiendo”, además de los activos de Volcan, “una deuda de US$780 millones, que tenemos que ver como la pagamos, y ese es el gran desafío”, manifestó a este Diario una fuente de Transition Metals, subsidiaria de Integra.
Por esta razón, la empresa sostiene que el precio que pagará por la minera peruana es muy superior a los US$20 millones declarados por Glencore en su comunicado (press release) del pasado 6 de mayo.
“El precio – señaló de manera tajante - todavía no está determinado, porque el público lee el comunicado y piensa: ‘Pagaron US$20 millones’. Pero no. Mentira. Ese no es el precio porque la compañía (Volcan) debe US$780 millones”.
Es más, la argentina indicó que el precio variará ostensiblemente cuando lance en los próximos días una Oferta Pública de Adquisición (OPA) dirigida a los accionistas minoritarios, para “ver quien quiere vender si es que quieren hacerlo”.
Cabe indicar que la argentina ha adquirido toda la participación (controlante) de Glencore en Volcan, compuesta por el 55% de las acciones clase A. La participación restante está en manos de la familia Romaña (20%), el empresario José Picasso (10%) y accionistas minoritarios que Integra no ha podido identificar.
Esto, debido a que Glencore “nunca quiso darnos información confidencial, con lo cual todas las acciones que hemos realizado se han basado en información pública, que cualquiera puede ver desde afuera, y que es muy limitada”, señaló la fuente consultada.
Estrategia financiera
Objetivo de la empresa argentina es “lograr que Volcan vuelva a ser lo que fue en el pasado”, lo cual implica trabajar para que “el valor de sus acciones y bonos suban considerablemente”.
A su entender esta es una meta realizable, debido al gran potencial geológico que atesora la empresa y que sería tan considerable que podría “ser un vehículo de consolidación y adquisición de otros activos mineros, no solo en el Perú sino también en Latinoamérica”.
De acuerdo a la fuente consultada, el saneamiento y relanzamiento de la Volcan podría concretarse en el lapso de 3 a 4 años, porque ahora sí habrá un dueño “metido de lleno en la compañía”.
“Volcan estaba atrapada entre los dueños que se peleaban, razón por la cual nadie le ponía atención y estaba a la deriva. Lo que vamos a hacer nosotros es seguir las cosas más de cerca y salirnos de conflictos societarios con accionistas minoritarios”, refirió,
En ese sentido, describió cuál será la estrategia que planean desplegar para lograr esta meta,
Se trata, explicó, de replicar el mismo modelo implementado por Integra en Edenor, la empresa de distribución eléctrica más grande de Argentina, la cual adquirió en una situación de fuerte distress en el 2020.
¿Qué hizo Integra? Lo mismo que viene haciendo con Volcan, es decir, adquirir la mayor parte de acciones clase A, sanear la compañía y restructurar, a continuación, sus deudas.
“Cuando compramos Edenor, esta tenía una capitalización de mercado de US$140 millones y una deuda de US$340 millones. Hoy, la empresa tiene una capitalización de US$915 millones y ninguna deuda. Ese es nuestro modelo y la última experiencia exitosa que queremos a replicar aquí en el Perú”, expresó la empresa argentina.
En esa línea, lo que esta se propone, en primer lugar, es honrar sus obligaciones, pagando “todo lo que Volcan adeuda”.
Y eso implica “alinear el cobro de la deuda con el flujo de la compañía“, de tal manera que si, la empresa vende un activo, el dinero resultante irá a pre-cancelar sus obligaciones. Y lo mismo si es que vende minerales o logra incrementar su producción.
Desinversión en activos
Componente fundamental de esta estrategia es la venta de activos periféricos (non-core assets) que no son consubstanciales CON EL negocio minero.
Es el caso de las centrales de generación eléctrica de la compañía, su participación en la cementera en Chile (Cementos Poplaico) y su negocio de real state al costado del puerto de Chancay.
“Hay montones de empresas aguas abajo(downstream) que no hacen a lo que es la actividad minera en sí, los cuales pueden ser vendidos o liquidados[A4] para poder pagar parte de la deuda”, anotó la fuente consultada.
En paralelo, indicó que Integra llevará a cabo una revisión del portafolio minero de Volcan para poner en valor todos los proyectos de cobre y algunos de oro que hoy no se están tomando en cuenta.
Del mismo modo, planea llevar a sus últimos estadios de desarrollo el proyecto polimetálico Romina, iniciativa que “va a dar la vuelta al valor de la compañía”.
Todas estas ventas, precisó la fuente consultada, se realizarán mediante subastas públicas a las que se invitarán “a todos los interesados que ya nos están contactando”, entre ellos traders y empresas mineras.
“Para nosotros Volcan es muy importante porque si bien tenemos otros activos mineros en Argentina y Brasil (particularmente, de litio y cobre) resulta que estos están por desarrollarse. Lo de Volcan, en cambio, es minería y minería vendible”, anoto la fuente de Integra.
Integra capital es una de las empresas con mayor proyección en Argentina. Cuenta con activo por más de US$17 mil millones en los sectores de minería, exploración, producción y refinación de petróleo, distribución de gas natural, y generación y distribución de energía donde es el líder en Argentina.
Se especializa en comprar empresas en crisis financiera, pero comentaron a este Diario que hace mucho tiempo que no compran una empresa con “tanto distress como Volcan”.
No obstante, confían en reflotarla gracias a su capital humano y su potencial geológico.