Un avance inicial en las acciones de Tesla Inc. luego de la sugerencia de Elon Musk de que podría retirarse de Twitter Inc. se desvaneció el lunes, ya que los inversores se preparan para las consecuencias duraderas de la adquisición de la compañía de redes sociales por parte del multimillonario.
Las acciones de Tesla cayeron hasta un 1,9 % a las 11:09 a. m., hora de Nueva York, borrando una ganancia anterior de hasta un 3,3 %. Las acciones han tenido un desempeño inferior al de los índices de referencia desde que Musk adquirió una participación en Twitter a principios de abril y cerró la adquisición a fines de octubre.
Musk, de 51 años, tuiteó el domingo que acataría los resultados de una encuesta en la que se le preguntó si debería dejar el cargo de director de Twitter. Los usuarios emitieron más de 17,5 millones de votos y el 57,5% estaba a favor de que renunciara al cargo.
No obstante, los analistas de Oppenheimer & Co. dijeron en una nota el lunes que siguen preocupados por los riesgos relacionados con Twitter para Tesla y rebajaron la calificación de las acciones al equivalente de una calificación de retención.
Si bien el equipo de Oppenheimer dirigido por Colin Rusch ha “tratado de separar los esfuerzos de Elon Musk que no son de Tesla” de su análisis de la empresa, la adquisición y gestión de Twitter por parte de Musk “ahora hacen que esa separación sea insostenible”.
Musk ha seguido el ejemplo de los usuarios de Twitter sobre decisiones que van desde si debe recortar su participación en Tesla hasta si debe restablecer la cuenta del expresidente Donald Trump. Si bien sus decisiones después de esas encuestas fueron relativamente sencillas, está menos claro qué hará a continuación con Twitter.
Musk tuiteó que será difícil encontrar otro CEO y escribió que la compañía “ha estado en la vía rápida hacia la bancarrota desde mayo”.
“Nadie quiere el trabajo que realmente pueda mantener vivo a Twitter”, dijo en otra publicación . “No hay sucesor”.
Tesla cerró la semana pasada en un mínimo de dos años, lo que le costó a Musk su posición en la cima del Índice de multimillonarios de Bloomberg. Si bien su CEO ha estado preocupado por Twitter, el fabricante de automóviles ha estado recortando los precios y la producción en China y ofreciendo incentivos para que los clientes reciban vehículos en los EE. UU.
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