British American Tobacco enfrenta seria investigación por corrupción

La mayor tabacalera del mundo, British American Tobacco (BAT), enfrenta una investigación formal de la Oficina de Fraudes Graves del Reino Unido. Esto tras los informes de que el fabricante de los cigarrillos Lucky Strike, Dunhill, entre otros, sobornó a funcionarios de gobiernos africanos para influir en la legislación sobre el tabaco en dicho continente.

En un comunicado, BAT informó que está llevando a cabo sus propias investigaciones —a través de asesores jurídicos externos—frente a las acusaciones por mala conducta y también dijo estar cooperando con el fiscal del Reino Unido.

Un informe de la BBC señaló, dos años atrás, que BAT tenía un lobbyista para acordar sobornos por un total de US$26.000 a tres funcionarios públicos en Ruanda, Burundi y las Islas Comoras en el 2015.

El medio periodístico británico dijo que el soborno fue revelado por un ex empleado, Paul Hopkins. En ese momento, BAT dijo no tolerar "la corrupción en nuestro negocio, no importa dónde se produzca".

La investigación que está realizando la Oficina de Fraudes Graves se suma a los problemas que viene teniendo BAT, luego de que la Administración de Alimentos y Drogas de Estados Unidos proponga quitarle a los cigarrillos sus cualidades adictivas, regulando el nivel de nicotina.

Esto provocó que las acciones de la compañía bajaran un 11% en las dos últimas sesiones bursátiles. Las acciones subieron un 0,3% a 4.731 peniques (centavos de libra) a las 8:32 a. m. en Londres.