Cebicherías limeñas prevén vender US$80 millones este año

Un crecimiento menos auspicioso y moderado experimentarán las cebicherías limeñas este año. Estas proyectan registrar solo un incremento de 15%, aproximadamente; mientras que en el 2013 este fue de alrededor del 30%, informó la Asociación de Restaurantes Marinos y Afines del Perú (Armap).

Así, se espera que las ventas de los restaurantes de comida marina alcancen al cierre del ejercicio los US$80 millones entre las 16 mil cebicherías, en promedio, que operan en la capital, de las cuales solo el 60% trabaja bajo todas las exigencias de ley, detalló Javier Vargas, presidente de Armap.

Comentó que ya hasta el mes de julio estas alcanzaron un aumento de 14%, lo que representó un movimiento de US$50 millones en su facturación.

“El primer semestre fue positivo en vista de la prolongación del verano; no obstante esta temporada de invierno no está siendo nada alentadora, porque el frío suele ahuyentar la afluencia de los comensales a este tipo de restaurantes. Esperamos que con la llegada de la primavera el consumo mejore”, señaló.

SOBRECOSTOS

A esta menor demanda se suma que las cebicherías en los últimos dos meses han enfrentado la escasez de especies hidrobiológicas a raíz del fenómeno de El Niño.

“Hoy estos restaurantes están asumiendo sobrecostos de hasta 30%, debido al incremento del precio del pescado y mariscos, pues El Niño ha generado que la captura de especies disminuya notablemente, extrayéndose casi el 50% de la captura normal”, dijo Javier Vargas.

Detalló que, a la fecha, el kilo del mero morique cuesta S/.40, aunque considerando la merma que se genera al ser fileteado su costo aumenta a S/.80 el kilo, mientras que el lenguado tras este proceso de merma oscila los S/.90.

Manifestó que hoy se importa lenguado, reineta, ojo de uva y jurel de Chile, basa de Vietman y tilapia de Ecuador.

MAYOR APOYO

En vista que hay sobrecostos que no se están trasladado al consumidor final, la rentabilidad de las cebicherías es cada vez menor y se ha tenido que disminuir personal en cocina y también en atención al cliente.

“Los empresarios nos sentimos desprotegidos. No sentimos el respaldo del Ministerio de la Producción en este tema y tampoco vemos que la gastronomía marina sea parte de la diversificación productiva”, aseguró.

En general, la problemática del sector es amplia y debería ser una preocupación y un trabajo de todos, de los dueños de restaurantes de comida marina, del Gobierno, de los pescadores, de los comerciantes, intermediarios y del comensal, entre otros.

“Si nosotros consumimos responsablemente podemos hacer un alto a la pesca de tallas mínimas de ciertas especies, porque no basta las vetas impuestas por el Ministerio de La Producción”, puntualizó Vargas en la antesala al festival gastronómico ‘Perú Pasión’ en Santiago de Chile, donde presentará el documental: “Perú, país de los cebiches”.