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En los últimos dos años, el grupo educativo Saco Oliveros ha recibido hasta cinco propuestas de compra, dice a Día_1, Wilmer Carrasco, presidente de la institución.
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El ejecutivo indica que cuatro de ellas fueron descartadas y con una, perteneciente a un grupo peruano-español, se han iniciado conversaciones.
“Nuestra idea es llegar a un acuerdo con empresarios que compartan la visión del grupo y, sobre todo, donde tengamos participación. Por eso no estamos desesperados, sino escuchando tranquilamente la propuesta”, afirma.
Carlos Gallardo, gerente general de Saco Oliveros, dice que la visión del grupo no solo es ofrecer un buen nivel educativo, sino continuar el apoyo a los alumnos que compiten y ganan torneos internacionales de matemáticas, ciencias, ajedrez y vóley, que les ha valido ser reconocidos fuera de nuestro país. “Por eso fuimos descartando las demás opciones”, explica.
Carrasco precisa que no tienen una fecha para dar una respuesta a la propuesta. “La otra opción atractiva es que se convierta en nuestro socio y ayude a financiar nuestra expansión en provincias y fuera del país”.
OTRA OPCIÓN: EL BID
Ante el ingreso de nuevos jugadores en el sector educativo, como son los casos de Innova Schools y Futura Schools, ambos con fuertes espaldas financieras, Saco Oliveros ha contactado al Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para ver la posibilidad de pedir un préstamo a largo plazo con tasa preferencial.
“Nos han solicitado una serie de requisitos, que calculamos podríamos entregárselos en el transcurso del 2015”, dice Gallardo.
En su opinión, este camino es factible en caso de que la venta parcial o hallazgo de un socio inversor no llegue a buen puerto en el corto plazo.
