El Comercio pudo saber que los equipos negociadores de los consorcios Gasoducto Sur Peruano (Odebrecht, Enagás y Graña & Montero) y Sempra-Techint siguen buscando llegar a un acuerdo para que el segundo compre las acciones de la firma brasileña en las empresas encargadas de desarrollar este megaproyecto de inversión.
Las conversaciones se están desarrollando este mismo sábado en Nueva York y en las próximas horas podría haber novedades.
La información representa un giro de 180 grados en una negociación que parecía caída hace 48 horas, cuando el Ejecutivo rechazó la solicitud del consorcio Sempra-Techint de modificar la cláusula anticorrupción del contrato de concesión del gasoducto.
En ese sentido, cabe precisar que el pedido de este consorcio no fue retirar la cláusula, sino modificarla de forma que no lo hiciera responsables de posibles hechos de corrupción ocurridos en el proceso de otorgamiento de la buena pro en el 2014.
El contrato de concesión del gasoducto contiene una declaración del concesionario en la que este afirma no haber "pagado, recibido, ofrecido ni intentado pagar, recibir u ofrecer ningún pago o comisión ilegal en relación con la concesión, el contrato o el concurso". La falsedad de dicha declaración tiene como consecuencia la resolución del contrato.
Ante ello, la fórmula propuesta por Sempra-Techint -y rechazada por los ministerios de Economía y Energía y Minas- era que el incumplimiento quedara "subsanado" si el concesionario acreditaba que los socios o accionistas que "dieron origen a la falsedad de dicha declaración, fueron sustituidos en la fecha en que se produjo el cierre financiero o en cualquier otro momento".