Los Golden Globes pueden ser conocidos como la “fiesta del año”, pero para la industria de la carne de res estadounidense no habrá mucho que celebrar cuando comiencen las festividades este domingo.
La entrega anual de premios se está volviendo vegana, y miles de invitados recibirán una comida a base de plantas por primera vez. La decisión, impulsada por las preocupaciones sobre el cambio climático, llega en un momento en que la industria de la carne de Estados Unidos está tratando de limpiar su imagen de contaminadora, con una moda de hamburguesas veganas que se extiende por todo el país.
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Las industrias relacionadas con la agricultura son las mayores emisoras de gases de efecto invernadero después de la energía. Bajo algunas mediciones, la agricultura genera más emisiones globales de gases de efecto invernadero que el transporte debido, en parte, a la producción ganadera.
Ante las denuncias de los consumidores, las empresas de carne están respondiendo, y la National Cattlemen’s Beef Association argumenta que los rebaños estadounidenses ya se crían de manera sostenible. El grupo cita que la industria tiene una huella de carbono de 10 a 50 veces menor que la de los productores mundiales rivales.
“Si bien la intención es buena, es probable que el impacto sea mínimo”, dijo el grupo empresarial dedicado al ganado en un comunicado sobre la decisión de los Globos de Oro de tener un menú vegano para la edición de estos premios. Si se eliminara todo el ganado en EE.UU. y todos los estadounidenses siguieran una dieta vegana, las emisiones de gases de efecto invernadero solo disminuirían 2,6%, asegura el grupo, citando un estudio de la Academia Nacional de Ciencias.
El movimiento de los Globos de Oro fue aplaudido en Twitter por el peso pesado de Hollywood Leonardo DiCaprio, así como por Mark Ruffalo, actor y activista del cambio climático. La entrega de premios ha demostrado ser adaptable a las tendencias alimentarias de Hollywood: en 2018, fue sin gluten y sirvió pescado como su opción no vegetariana. El bistec no ha sido un plato principal desde 2017.
Los funcionarios de la entrega de premios no respondieron a las solicitudes de comentarios.
La gran imagen contaminante de la industria cárnica proviene de las vacas, que emiten metano como parte de sus procesos digestivos normales. En pocas palabras, los gases y el estiércol de las vacas son los grandes culpables. Pero los grandes minoristas e inversionistas han estado presionando a las empresas para que mejoren su huella. Tyson Foods Inc. y Cargill Inc. ya han prometido reducciones ambiciosas en las emisiones.
Pero al menos por ahora, las estrellas que asistan al espectáculo en Beverly Hills, California, comerán vieiras de hongos ostras junto con una sopa de remolacha fría.