Maestros sin obras: La construcción lleva dos años en recesión

El BCR proyectó en diciembre un crecimiento de 3,6% de la construcción para el 2017. Sin embargo, la Cámara Peruana de la Construcción (Capeco) pone en duda esta cifra en un contexto poco alentador. “Ya vemos cómo la cifra oficial es desmentida por la realidad”, apuntó Guido Valdivia, director ejecutivo de esta institución, haciendo referencia a cómo la caída del sector el año pasado superó lo previsto por el ente emisor. 

La producción de este sector ya ha tenido resultados negativos en el 2015 y el 2016. De repetir la tendencia este año, se cumpliría la primera racha de tres años consecutivos de contracción desde el período 1999-2001. “No podemos darnos el lujo de repetir esa experiencia”, comentó Valdivia. “A diferencia de esos años, existe ahora una industria más diversificada, más recursos públicos y [más] oportunidades de inversión”, agregó.

Balance 2016
Cuatro factores explicarían el crecimiento negativo de -3,15% del sector en el año pasado, indicó Valdivia. 

En primer lugar, los cambios en la Ley de Contrataciones del Estado. “Hace un año alertábamos sobre cómo iban a generar un problema respecto a la ejecución presupuestal y a las inversiones”, dijo el representante del gremio. Este tiempo de aprendizaje habría dificultado el cumplimiento de metas. 

Otro factor, indica, habría sido que el gobierno anterior “no fue muy productivo en la promoción de las políticas de vivienda”. La creación de la figura legal del leasing inmobiliario, que promovería la construcción de viviendas demoró más de un año en implementarse. Y hoy, “existe el programa, pero no hay colocaciones [de viviendas]”, señaló Valdivia. 

La falta de servicios de agua y desagüe en Lima y en las principales ciudades también fue un obstáculo para el desarrollo del sector. “Es una odisea conseguirlos”, advirtió. 

La cuarta causa fue la dificultad en implementar grandes proyectos de inversión privada y pública, que están retrasados. Por ejemplo, la primera etapa de la implementación de una operación en una mina es la de edificar su infraestructura y en dicho sector ha habido pocos nuevos proyectos. 

Desafíos para el 2017
La proyección del BCR para el 2017 puede sostenerse en la capacidad económica de las familias, en las posibilidades de inversión en los sectores público y privado y en los recursos disponibles del Estado, pero los factores que precipitaron la caída de la construcción aún subsisten, señaló el representante de Capeco. 

Se espera que uno de los ‘drivers’ de crecimiento de la construcción sea el subsector inmobiliario, para el que se estiman las cifras más auspiciosas. Así, para enero de este año las empresas de este rubro estiman haber crecido 6,32% respecto al mismo mes del 2016, de acuerdo con la última encuesta de Capeco, señaló Ricardo Arbulú, presidente del Instituto de la Construcción y el Desarrollo. 

Sin embargo, los proveedores de materiales mantienen una expectativa negativa de -3,58%, que no se condice con el ritmo de las inmobiliarias. Arbulú explica esto a través del ciclo de producción. “Existe la expectativa positiva de las inmobiliarias de desarrollar proyectos, luego hacer la preventa y después la compra de los materiales”, dice. Por eso, Arbulú contempla la posibilidad de que en unos seis meses haya una recuperación en los números de los proveedores. 

Pero a ellos también los ha afectado la menor inversión en infraestructura causada por el Caso Lava Jato. Los actores del subsector infraestructura estiman que han tenido una contracción interanual de 2,9% en enero. 

Ante la dimensión que ha tomado el escándalo y su impacto en el sector, el gremio instó al presidente Pedro Pablo Kuczynski a asumir el liderazgo de la lucha anticorrupción en la industria y sancionar y cambiar las normas para mitigar sus efectos. 

Asimismo, Capeco advierte que la gestión de la licencia social en los proyectos mineros jugará un rol central. Valdivia, además, sostuvo que “la gente, con legítima preocupación, rechaza proyectos de concesiones, de iniciativa privada y de asociaciones público-privadas”. 

“El gobierno debe ser capaz de convencerlos de que son un vector importante [para que crezca la economía]”, explicó. 

Este año las empresas constructoras calculan que recibirán 72% de ingresos por obras de infraestructura en provincias. De Lima, un 20% y del extranjero, 9%. 

Oferta inmobiliaria
El precio de las viviendas se incrementará en 1,57% este año, dentro del rango meta de inflación del BCR, pronosticó el gremio de constructores. 

Esta proyección se basaría en la presión que ejercerá la subida de tasas de interés de la Reserva Federal de EE.UU., que encarecería los préstamos locales, y en el déficit de dos millones de viviendas en el Perú. 

Hoy, se cuentan alrededor de 400 mil viviendas en stock, lo que hace evidente un problema de oferta inmobiliaria en el país.