(Imagen: Andina)
(Imagen: Andina)
Marcela Mendoza Riofrío

Una nueva riña se ha iniciado en el sector telecomunicaciones. En esta oportunidad las opiniones encontradas están entre los operadores de y el Osiptel, que ha como un concepto adicional al consumo.

La propuesta surge ante una investigación que motivaron los reclamos de los usuarios a través de las asociaciones de consumidores, quienes consideraban que se cobraba un precio excesivo por dichos equipos. Incluso Aspec el año pasado denunció como ilegal el alquiler de los mismos, aduciendo que se aprovechaba ese concepto para disimular hacer un cobro innecesario.

Los operadores rechazan las acusaciones y la propuesta del regulador. Estiman que incluir el cobro del decodificador en el pago mensual por el servicio o frenar su financiamiento a solo seis meses  no implicará reducir los gastos del consumidor. Solo se conseguirá dejar de tener la opción prepago (que incluye la venta del equipo como inicial) y trasladar el costo del mismo al recibo mensual, porque su uso es imprescindible.

¿POR QUÉ ES NECESARIO?
​Para empezar, según expuso el mismo regulador, el decodificador es indispensable para recibir el servicio. Para poder entender la necesidad del mismo hay que hacer un breve repaso histórico. 

Antes, cuando la televisión solo se trasmitía en señal analógica, bastaba tener una antena receptora para poder ver los programas. Cuando surgió la opción de Tv paga, ya sea por satélite o por cable, hacía falta que alguien tenga un receptor especial: una antena parabólica. El cable llegaba a un aparato receptor y lo trasladaba al televisor y listo. 

Con la migración hacia la televisión digital, es decir cuando los videos se convierten en unos y ceros (código binario) para ser transportados, se necesitó un receptor que convierta esos unos y ceros en imágenes. La programación solo se recibe si tienes un decodificador para esos unos y ceros. Sin ese convertidor, es imposible ver programa alguno. 

Ahora no todos los decodificadores son iguales. Al contrario, son incompatibles según el tipo de tecnología que emplean. Existe la alternativa estadounidense, la japonesa, la europea y hasta una china. Cada operador elige la tecnología que le conviene y la utiliza con sus clientes libremente. Pero si eres cliente de una tecnología, no puedes usar el equipo de la otra. Así funciona en todo el mundo.

Cuando se empezó la migración a las alternativas digitales en el país, algunos operadores optaron por regalar una decodificadores sencillos. Luego apareció un competidor que ofrecía más funciones -como por ejemplo grabar programas- gracias al uso de decodificadores más complejos y caros. Entonces todos empezaron a ofrecer variedad de productos y ya no los regalaban, sino que los vendían o alquilaban o financiaban su compra a plazos. 

¿CÓMO LOS CONSIGO?
​En el país existen tres grandes operadores móviles que ofrecen el servicio de Tv paga digital: Claro, Movistar y DirecTv. Hay como 550 empresas registradas para ofrecer el servicio, pero muchas son informales y son solo las tres citadas las que ofrecen el servicio y ante las que se está reclamando los costos. 

El decodificador no es un artículo que se consiga en el supermercado ni en la tienda de electrónica favorita. En el país no está permitido vender televisores ni decodificadores de diferentes estándares, solo los que reciben la señal japonesa brasileña, pues esa es la alternativa que usa la televisión pública o gratuita.

La televisión paga no está obligada a usar la señal japonesa, puede usar la que desee porque se trata de un servicio pagado. Su única obligación es darle los medios a sus clientes para recibir la señal, es decir poner a su acceso los citados decodificadores. Y eso han venido haciendo, como corresponde. Cada operador importa lo que va a usar y lo proporciona a sus clientes al costo que considera apropiado. 

Osiptel resumen en este cuadro las tarifas vigentes hasta diciembre del 2017
Osiptel resumen en este cuadro las tarifas vigentes hasta diciembre del 2017

¿Dónde está el problema entonces? En las quejas sobre lo que se considera un cobro excesivo. En el mercado hoy los operadores ofrecen los decodificadores por precios que van desde S/49,90 en prepago (DirecTv) hasta alquileres de S/10 al mes, pasando por 24 cuotas de S/12, es decir un equipo de más de S/300. 

¿Se reducirá el precio que actualmente se cobra por el decodificador si se introduce como parte de la renta mensual? ¿Será la solución prohibir la venta del decodificador como artículo independiente? Los operadores consideran que no y por eso han elevado su pedido de reformular la propuesta normativa. El Osiptel será ahora quien deberá evaluar esas sugerencias y decidir cómo se deberá hacer el cobro por los citados indispensables equipos.  

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