Sostengo que desarrollar nuestra consciencia a nivel individual es clave para poder ser exitosos de forma integral, competitiva y sostenible como empresas y como país.
Las definiciones de consciencia son varias: Wikipedia la define como el estado de estar en conocimiento de un objeto externo o del estado dentro de uno mismo.
Según la organización Psychology Today, el santo grial de la ciencia es entender la consciencia humana. En 1960, Maharishi Mahesh Yogi sostuvo que la consciencia elevada de un individuo puede afectar la consciencia de la colectividad. Y que el 1% de una población practicando meditación transcendental, tendría un efecto de mejora significativa en toda la población. El estudio más famoso realizado respecto al “efecto Maharishi” se dio en Washington D.C. en 1993, donde 4.000 personas se reunieron consistentemente para practicar las técnicas. Al mes siguiente de estos esfuerzos, la criminalidad bajó 11% en la ciudad de Washington, y también en las ciudades de Manila y Delhi. (fuentes: Mindvalley y Maharishi University of Management).
Esta semana he estado en la Conferencia Anual de Ejecutivos (CADE), que organiza el IPAE en Paracas cada año. CADE es un evento de toma de consciencia y conocimiento, que busca que los ejecutivos y empresarios se informen de las necesidades y la visión del país, se alineen y se comprometan con esas intenciones de cambio y las ejecuten. Siento que vamos ganando buena tracción y que traer a la vida esta nueva visión será fundamental para nuestro futuro.
Las tres grandes áreas discutidas y expuestas esta semana han sido: integridad, sostenibilidad y competitividad. Todas ellas, coincido con IPAE, son fundamentales para el progreso del país. Sin embargo, ninguna de ellas puede ser alcanzada sin el desarrollo de la consciencia individual y empresarial y de la ejecución de los compromisos acordados, por eso ahí se han mencionado en más de una ocasión los conceptos de líder consciente y empresa consciente. Destaco la visión compartida por Fernando Zavala de convertirnos en un país líder en competitividad al 2035, con ingresos per cápita por encima de los US$22.000 y con niveles de pobreza menores a 10%. El trabajo y las propuestas realizadas por Fernando y su equipo son potentes y requieren que el empresariado trabaje conjuntamente con el gobierno y las instituciones para llevar todas ellas a cabo.
La integridad es la base fundamental para lograr un país sostenible. Los piratas y los ladrones solo se interponen en los esfuerzos para construir países viables, hay que erradicarlos, como se trata al cáncer en el cuerpo. La crisis nacional de valores y ética que vivimos es justamente por la falta de consciencia del impacto que tiene obrar de forma dolosa y fraudulenta, y por la falta de aplicación de consecuencias para cambiar el país. Requerimos educarnos en el gran valor de ser honestos e íntegros y subir significativamente el costo de ser corrupto. Singapur tiene ejemplos que valdría la pena estudiar y aplicar.
Este proceso de avanzar en consciencia e integridad no es solo labor de los ejecutivos y empresarios del país. Tomar consciencia de nuestro rol en el mundo, de nuestra responsabilidad es tarea de todos los seres humanos.
No pretendo disertar aquí todas las técnicas de desarrollo de consciencia ni mucho menos, solo aspiro en estos breves párrafos a generar el suficiente interés para que un grupo de lectores se embarque en su propia jornada de descubrimiento de consciencia y fortalecimiento para honrar nuestra palabra y hacer realidad nuestros compromisos.
En mi experiencia, la consciencia se logra a través de la disertación intencionada, la meditación, la reflexión, la lectura, el yoga y otras prácticas de introspección. Les recomiendo dos libros que me han ayudado particularmente: “El libro tibetano de la vida y de la muerte”, de Sogyal Rimpoché, que da guía para tomar consciencia del ciclo de la vida y de la muerte y de cómo vivir para abrazar la muerte con plenitud y dignidad. Por otro lado, el nuevo libro de David Fischman, “El misterio de la luz”, que leí hace poco y está teniendo un impacto importante en mi vida, pues me llevó en una aventura de descubrimiento de la meditación activa en comunidad que potencia la meditación que he estado haciendo en los últimos años.
Espero que estas reflexiones los motiven a embarcarse en una aventura de descubrimiento para crear constantemente la mejor versión de ti y de nuestro país.
Seamos el cambio que queremos ver en el Perú.