No cabe lugar a dudas que la mejor decisión que puede tomar una agencia de publicidad es atraer y concentrar el mejor talento creativo.
El equipo creativo es una especie única y especial que a punta de pasión, audacia, valentía y amor por lo que hace se enfrenta día a día a los mayores retos que un mercado como el nuestro les pueda ofrecer.
Son ellos y ellas un arma imprescindible para encontrar aquellas grandes ideas que pueden revolucionar una categoría, que pueden revolucionar el negocio o a toda una industria.
Pero tener entre nuestras filas a los “Messi” de la publicidad y la innovación pueden servirnos de poco o nada si es que no tenemos a aquella dupla igualmente valiente, audaz, ambiciosa y apasionada del otro lado de la puerta. Y esa dupla es el cliente. Por eso, la dupla creativa más potente no está dentro de la agencia.
Todas las grandes marcas y campañas más exitosas y memorables de la historia del marketing y la publicidad se hicieron en complicidad entre el cliente y la agencia: La dupla más potente que puede existir en nuestro negocio.
Desde las legendarias campañas de Apple realizadas en complicidad entre Steve Jobs y Lee Clow (Fundador de la agencia TBWA Chiat Day) y las no menos famosas e inspiradoras campañas de “Just Do It” de Nike creadas de la mano de Phil Knight (Fundador de Nike) y Dan Weiden (Fundador de la agencia Weiden & Kennedy); pasando por marcas emblemáticas como Coca Cola, Pepsi, Volvo, Mastercard y Volkswagen hasta las sociedades más recientes que han llevado a marcas como Burger King y Dove a convertirse en íconos del marketing global.
Y sin ir muy lejos, en nuestro mercado no hubiera podido existir un caso tan emblemático como “La Buena Familia” y los apellidos de San Fernando sin la dupla Juan Carlos Gómez de la Torre (Fundador de Circus, mi socio y amigo) y Juan Pablo Klingenberger (Ex - CMO de San Fernando).
Son estas las duplas que siempre nos han inspirado y han impulsado los negocios y la industria hacia adelante.
Después de 30 años de carrera en publicidad puedo decir que soy un convencido de que la única manera de conseguir verdaderamente resultados de negocio sobresalientes es trabajando como un solo gran equipo con tu cliente. Para ello es fundamental que ambos compartan la misma sed y el mismo hambre para hacer historia juntos.
Si a tu cliente no le importa la creatividad te garantizo que harás la publicidad más aburrida y poco excitante del mundo.
Si tu cliente no valora las ideas te aseguro que nunca harás una buena idea. Si a tu cliente no le interesan los premios te puedo decir que jamás ganarás ni un premio consuelo.
Por eso, una vez que encuentres a tu mejor dupla fuera de la agencia, no la sueltes. Sean cómplices. Aprendan juntos con humildad. Trabajen como equipo. Rétense constantemente. Y vuélvanse “Partners in Crime” de la próxima gran campaña, idea de negocio o marca icónica que todo el mundo quiera seguir y que usen como ejemplo del trabajo más extraordinario e inspirador de la industria.