Aún estamos a inicios de año, la época en la que muchos de los inversionistas nos convertimos en oráculos y visionarios de lo que puede pasar en los siguientes meses. Así las cosas, desempolvaré mi bola de cristal e intentaré hacer diez predicciones.
- El mercado global seguirá subiendo, pero estará marcado por los eventos geopolíticos. El alza será impulsada por el crecimiento económico de EE. UU. y de algunos países emergentes. Sin embargo, esta subida estará marcada por circunstancias como la guerra en Ucrania y el conflicto en Medio Oriente.
- Las elecciones presidenciales en Estados Unidos serán un catalizador clave para el mercado global. Si Donald Trump gana, es probable que se produzca un aumento en la volatilidad y el riesgo político, pero también de los retornos.
- Perú crecerá a velocidad crucero, pero no será suficiente para reducir las brechas de pobreza. Es posible que en el 2024 el país crezca a una tasa entre 2% y 3%, un buen ritmo para una economía desarrollada. Pero para combatir la pobreza en un país emergente, se necesita un crecimiento más rápido y una capacidad mayor para la redistribución de la riqueza por parte del Estado.
- La inflación en los mercados desarrollados nos dará un último susto en el primer semestre del año, para luego continuar su tendencia a la baja. Deberíamos tener una segunda mitad con los bancos centrales de los mercados desarrollados bajando sus tasas de interés.
- El precio del petróleo se mantendrá en el rango entre los US$80 y US$100 el barril, debido a los problemas en el Golfo Pérsico y el Mar Rojo.
- También se prevé que la oferta de petróleo de Estados Unidos evitará que el precio se dispare, debido a que están produciendo más que nunca y esta tendencia continuará.
- A nivel global, las tasas de interés continuarán bajando por la ralentización (no decrecimiento) del PBI global.
- El dólar seguirá siendo la moneda principal del mundo, debido a la fortaleza de la economía estadounidense y a la confianza en el billete verde como refugio seguro.
- El ciclo de metales base se mantendrá por la falta de nuevos proyectos, que afectan la oferta y la demanda para la construcción en las economías desarrolladas.
- Por último, el sector tecnológico se consolidará a través de fusiones y adquisiciones por la consolidación de tecnologías ganadoras en el mundo del ‘social media’, ‘streaming’ e inteligencia artificial.
Adicionalmente, como bonus, debido al crecimiento económico y a la caída de las tasas de interés, los rendimientos de la mayoría de las opciones de ahorro en el Perú, incluida la AFP, serán positivos.
En general, el 2024 será positivo para el Perú y el mundo. Sin embargo, habrá algunos riesgos geopolíticos que podrían descarrilar esta visión. Un escalamiento de los conflictos regionales, con una participación más activa de las grandes potencias, sería el escenario que podría echar por la borda estas predicciones.