PBI cayó 0,82% en octubre y acumula seis meses consecutivos en negativo

En octubre del 2023 la producción nacional se redujo 0,82% en comparación a lo obtenido en el mismo mes del 2022, según el informe técnico de Producción Nacional elaborado por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). Este es el sexto mes consecutivo en el que la actividad económica se contrae.

Los sectores con desempeño negativo durante el mes fueron Construcción (-9.06%); Financiero y Seguros (-8,34%); Agropecuario (-7,62%); Telecomunicaciones (-2,81%); Manufactura (-2,69%); Alojamiento y Restaurantes (-1,22%); y Servicios Prestados a las Empresas (-1,04%).

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En tanto, los indicadores positivos en octubre fueron los de Pesca (51,62%); Administración Pública (3,25%); Minería e Hidrocarburos (3,10%); Electricidad, Gas y Agua (2,62%); Comercio (1,36%); Transporte (0,09%); y Otros Servicios (2,63%).

En el acumulado anual, el PBI tuvo un retroceso de 0,65%. Por otro lado, la caída fue de 0,27% en el comparativo del año comprendido entre noviembre del 2022 y octubre del 2023, y el de noviembre del 2021 y octubre del 2023.

El desempeño negativo del mes se explica principalmente en la caída del sector construcción. El INEI señaló que los resultados se debieron al menor consumo interno de cemento por menor inversión privada en construcción y autoconstrucción (-8,68%) y al menor avance físico de obras públicas (-10,36%).

“Al caer 9%, el sector Construcción es el factor más importante que explica esta caída del PBI. Estos resultados son parte de un proceso de ajuste luego de la pandemia, cuando se gastó bastante y permitió el avance del sector. Sin embargo, el ajuste es más largo de lo que antes pensábamos”, comentó Eduardo Jiménez, jefe del Sistema de Información de Macroconsult.

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Asimismo, indicó que este ajuste se extendería hasta mediados del 2024. A partir del segundo semestre comenzaría la recuperación del sector, pero cerraría el próximo año en negativo.

“Esperamos que se mantenga una tasa negativa, de -1,5% el próximo año, pero con dos semestres bien separados: el primero en negativo y el segundo en positivo”, agregó.

Por otro lado, el informe de INEI muestra que la contracción del avance físico de obras públicas de los Gobiernos Locales fue de 27,75%. En tanto, el avance del Gobierno Nacional aumentó a 19,13% y el de los Gobiernos Regionales en 0,08%, pero no fue suficiente para mejorar los resultados del sector.

“El sector construcción tuvo un año muy malo. Lo que explica esta caída tan fuerte ha sido el poquísimo avance físico de obras a nivel de Gobiernos Municipales, que ha tenido un retroceso grande a pesar de los esfuerzos del Gobierno Nacional y de los Gobiernos Regionales. Hay obras paralizadas y obras que no logran licitarse para iniciar a tiempo la construcción, la obra física”, explicó Luis Miguel Castilla, exministro de Economía y Finanzas y director ejecutivo de Videnza Instituto.

Por otro lado, el sector Minería e Hidrocarburos creció en 3,10% frente a octubre de 2022. Sus resultados son ascendentes desde febrero de este año, pero el ritmo de crecimiento se ralentizó. La variación acumulada anual es de 8,78%. A pesar de esto, sigue siendo el principal sector que contribuye a las actividades de producción nacional.

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Los especialistas consultados coincidieron en que la minería es uno de los grandes motores que sostienen el PBI, sin embargo, advirtieron que la falta de grandes proyectos podrían implicar un crecimiento de 0% a futuro.

“Los resultados son una muestra del agotamiento de Quellaveco. Lo preocupantes es que no tenemos proyectos grandes en minería hacia el 2030. Entonces solo podemos esperar que el sector crecerá muy poco. Sin nuevos proyectos debería crecer en 0%, más allá de movimientos específicos y de algunos proyectos pequeños que entrarían en operación, pero no mueven demasiado la aguja”, explicó Jiménez.

Castilla coincidió en que es preocupante que no se tengan proyectos mineros que puedan impulsar la producción del sector en los próximos años.

“El resultado del informe es de 3% porque la base de comparación es más alta. El efecto de mayor producción por Quellaveco ya cedió y, si bien la producción se ha mantenido, no hay operaciones nuevas de relevancia. Dejaremos de tener el impulso que Quellaveco daba a la minería y al no haber nuevos proyectos eso es preocupante”, remarcó.

Para Hugo Perea, economista jefe de BBVA Research, los resultados negativos del PBI en este y otros sectores también se entienden por los eventos específicos que afectaron a la economía peruana este año.

“Los choques que han golpeado a la economía este año son complicados. Las sequías, los efectos del ciclón Yaku, el Fenómeno de El Niño que afectó a los resultados de la Pesca y el Agro. También la convulsión social que erosionó la productividad del país y la confianza de los empresarios”, señaló.

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Sin embargo, el crecimiento a futuro no es auspicioso por las debilidades institucionales que no permiten generar confianza en el inversionista.

“Estos choques son de carácter transitorio, pero el crecimiento promedio de los próximos años apunta a un 2,5%, que es muy bajo para generar empleo de calidad, reducción de pobreza y otros. Esto no se da por efectos transitorios, sino por el debilitamiento institucional y las políticas públicas que afectan la productividad. En ese entorno es muy difícil generar inversión y confianza”, añadió Perea.

Por otro lado, Castilla indicó que el resultado del PBI de octubre confirmaría que este será un año de contracción económica.

“La producción debería crecer en más del 2% en el último bimestre del año para evitar una contracción, cosa que veo poco probable. Con esto ya se confirma una contracción económica este año y era lo previsible. No es mayor la caída porque el sector pesquero ha podido recuperarse un poco. Tenemos una economía emproblemada”, sentenció.