Muchos consideran dentro de sus planes de crecimiento profesional estudiar una maestría en el extranjero con el objetivo de retornar al país para obtener mejores empleos con mayores ingresos económicos y satisfacción personal.
Sandra Cubas, directora de CL Selection, explica que hay que evaluar diversos factores antes de tomar esta decisión para lo cual ofrece estas pautas:
1. Elegir una universidad de prestigio. Existen rankings globales de organizaciones confiables que corroboran la calidad de las universidades, elegir el mejor centro de estudios que se pueda financiar es clave porque las empresas más importantes del Perú sólo consideran el hecho de estudiar fuera como un plus para los postulantes cuando la maestría que realizó en una universidad de prestigio.
2. Adquirir conocimientos que agreguen valor. Se debe considerar cuál es el valor que la maestría que piensa estudiar le va a agregar efectivamente a su carrera y a las empresas para las que quiere trabajar.
3. Analizar la relación costo- beneficio. Las maestrías más destacadas suelen requerir una inversión considerable, el postulante debe analizar objetivamente los medios con los que cuenta para financiar sus estudios y manutención, además del tiempo en el proyecta recuperar esta inversión.
4. Maestría presencial sobre virtual. Definitivamente es más importante y más valorada por los empleadores la educación presencial y pesa más en el CV de un ejecutivo que una maestría virtual. Esta última ayuda al profesional porque de todas maneras ofrece un valor agregado, pero aún no es el mismo que el de una maestría presencial.
5. Becas. Diversas organizaciones nacionales y extranjeras ofrecen becas para estudiantes de maestrías de países en vías de desarrollo como el Perú, también existen convenios entre gobiernos con el mismo fin, etc. Es crucial averiguar si existen estas posibilidades y cómo acceder a ellas.
6. Experiencia de vida. Estudiar y vivir fuera es una experiencia increíble, sin embargo es importante considerar también las diferencias culturales, el dominio del idioma, el costo de vida, la situación política, social y económica, el clima, la relación del Perú con ese país, si contamos con embajada o consulados, etc. para decidir estudiar fuera.
7. Tener un fondo de retorno. Aparte del dinero para financiar los estudios y estadía en el extranjero, los interesados deben tener una bolsa de dinero o fondo de retorno que les servirá durante los meses que les tome recolocarse luego de haber culminado los estudios, sobre todo en el caso de una maestría.
8. Paciencia en la recolocación laboral. En algunas ocasiones, recolocarse luego de haber regresado no se da rápidamente e incluso puede tomar unos meses. No hay que desanimarse si luego de la maestría no se han obtenido mejores posiciones o un salario más alto en el corto plazo.
Cubas explica que “es importante tener en cuenta que estudiar una maestría en el extranjero no asegurará una posición de mayor nivel salarial o jerarquía. Depende de uno mismo crecer en las organizaciones de acuerdo el valor agregado que pueda generar de acuerdo a sus competencias. Definitivamente una maestría ayuda en el CV de un ejecutivo, sin embargo siempre hay que buscar qué más podemos agregar”.