Lanzar el primer disco es el sueño de muchas bandas y cantantes que quieren vivir de su música o, al menos, darse a conocer en la fauna musical.
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Eduardo Ponce, representante de la disquera Sony Music en el país nos explica paso a paso cómo lograrlo en la industria peruana. Apunta que la fórmula no siempre será exacta.
Siempre va a depender de los recursos y lo que más se ajuste al estilo del artista. Es así que sacar a la luz un disco puede costar entre US$3 mil y superar largamente los US$10 mil. Los artistas consolidados no invierten menos de US$500 mil.
MÚSICA
Primero, el artista debe recordar que su materia prima son las canciones. Aunque parezca obvio debe tener canciones propias, negociar con algún compositor que pueda cederle canciones nuevas o escoger canciones del mercado (para un álbum tributo).
En caso de tener un productor musical, éste tendrá una bolsa de canciones de diferentes compositores que podrá utilizar.
“Nosotros creemos que es importante porque al tener cierta distancia con el proyecto es más objetivo. Además, tienen ya experiencia al producir decenas de discos”, explica.
Tienen que ser suficientes porque un disco sale a la luz con 12 canciones, en promedio.
ESTUDIO DE GRABACIÓN
La elección del estudio dependerá del presupuesto del artista y las necesidades de su música. Si quiere tener muchos instrumentos en simultáneo necesitará una sala más grande. Por ejemplo, una banda de rock requerirá grabar 15 tracks por la cantidad de instrumentos, mientras una de salsa grabará 40 pistas, por lo menos.
A nivel de costos, el mercado ofrece variadas opciones que van entre US$20 a US$100 por hora.
Para no salirse del presupuesto, Ponce recomienda dedicar muchas horas de ensayo. “Un error típico es que la banda va a grabar sin ensayar lo suficiente y termina haciéndolo en la sala de grabación”, apunta.
En el proceso de grabación, la figura del ingeniero de grabación o sonidista es vital. También será el encargado de mezclar de acuerdo al género musical. “Cada uno tiene unos requerimientos especiales de mezcla, a veces en el pop se prioriza la voz. Es cuestión de gustos, del estilo”, señala.
MASTERIZACIÓN
Este es el último paso. Al masterizar tu grabación lograrás darle un óptimo sonido. Hay estudios especializados que cobran entre US$500 y US$800, el costo puede triplicarse si se trata de estudios de renombre.
“Muchos artistas pueden gastar menos en producir un disco, pero luego los escuchas y te das cuenta que la calidad del sonido no es tan bueno: utilizar una consola de US$5 mil no te da el mismo producto que una de más tecnología de US$250 mil. Por lo general, a más inversión, consigues mayor calidad”, añade.
CONCEPTO DEL DISCO
Ahora viene imprimir tu imagen al disco. Ponce explica que es importante que el artista sepa a dónde quiere ir. Y si no, su productor musical lo transmitirá. Así podrán elegir el vestuario dentro del álbum, según el target y estilo de música. En este punto el trabajo de ‘styling’ recae en fotógrafos y diseñadores.
Una vez listo, imprimes tu disco y se inicia la carrera. “Acá arranca el trabajo de difusión, cuando tienes que llevar tu música a las radios, a internet, a la prensa. Si quieres que la gente te conozca, tienes que hacerle llegar tu talento”, señala.
¿CÓMO LLEGAR A UNA DISQUERA?
El representante de Sony Music en Perú distingue dos caminos: presentarse a los concursos de música como Claro Perú, que vienen a ser una vitrina para mostrarse. Y otro, trabajar para ser descubierto. Tocar en bares, en shows, usar las plataformas de las redes sociales que dan gran exposición y difundirlas. Hay casos en que los productores musicales los ven y los acompañan en el proceso de grabación porque les gusta su música. Todo es muy sensorial en este negocio.
Definitivamente, la ventaja de tener un contrato artístico con una disquera es que ella asume todos tus gastos de grabación. La disquera se convierte en la dueña del master y paga regalías al artista, el porcentaje se negocia según el caso.
CAMBIO EN LA INDUSTRIA
En la industria ha habido una expansión de plataformas. Ponce explica que ahora el modelo de negocio de Sony Music ha cambiado desde hace cerca de una década. Hoy, se trata de un modelo de 360 grados. ¿En qué consiste? Sabemos que la industria discográfica vende menos discos, por eso ya no se concibe solo el producto físico, le abre las puertas a Internet.
“En el mundo actual, el consumo de música se logró monetizar a través de espacios como itunes, spotify, youtube. Cuando haces click en una canción, un pedacito de publicidad va a las discográficas. Por eso trabajamos muchos en mercadeo con los artistas que fichamos”, cuenta.
En la industria del 2014, el empresario destaca que el modelo de negocio de la disquera compone: venta de patrocinios, conciertos, publicidad y ventas de discos. Hoy, la fuente de ingresos no es el fotograma sino la venta de tickets para los shows y esa será la tendencia de los próximos años, proyecta.