Hace una semana el directorio de Petro-Perú decidió disolver su asociación con Graña y Montero en los lotes III y IV de Talara. Poco después, corrió con fuerza el rumor de que se retiraría del negocio de distribución de GLP. La estatal parecía perder posiciones en el sector hidrocarburos. Rosa María Ortiz, ministra de Energía y Minas, asegura que esto no ocurrirá.
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¿El gobierno ha cambiado de política con respecto a Petro-Perú. ¿Qué es lo que quiere de la estatal?
Deseamos que Petro-Perú sea y siga siendo la primera empresa del país. Pero también queremos que cuando se involucre en un proyecto lo haga bien.
¿Qué quiere decir con eso?
Que no desperdicie la plata de todos los peruanos.
¿Hoy la está desperdiciando?
Lo hubiera hecho si ingresaba a los lotes III y IV. Así lo ha determinado el nuevo directorio, en base a información final proporcionada por la administración.
Hace tres meses el directorio estaba convencido de que el ingreso a esos lotes sí era un buen negocio. ¿Y ahora se da cuenta de que iba a perder plata?
Hay que tomar en consideración dos cosas. Primero, que ha habido cambio de directores. El nuevo directorio es mucho más profesional. En segundo lugar, los nuevos directores pidieron información adicional para justificar por qué se tomó la decisión de ingresar a los lotes III y IV y se dieron cuenta de que el reporte proporcionado a la anterior directiva no estaba completo, lo que indujo al error inicial. La nueva información mostró que el negocio sí era de alto riesgo.
¿Esa fue la razón que hizo cambiar de opinión a los directores?
Produjo una gran diferencia. Por ejemplo, la directora que representa al MEF votó en contra. Otro director estuvo ausente. La representante de los trabajadores votó a favor y luego se retractó porque se sintió engañada. Y otro tanto pasó con los dos nuevos directores. Ahora el tema está en manos del Órgano de Control Institucional (OCI), porque existen responsabilidades que deben ser determinadas.
¿Responsabilidades de quién?
De la administración. La administración de Petro-Perú ha engañado al directorio anterior.
¿Se refiere a la gerencia?
A las gerencias. Exacto.
Pero las gerencias se mantienen. No han sido cambiadas.
Se mantienen porque no se puede tomar decisiones de forma apresurada ni con hígado. Por eso se ha pasado el pedido a la OCI, para que se encargue de este tema.
Extraña todo esto, porque se tiene la impresión de que el gobierno ha desplegado dos políticas energéticas: la de sus antecesores inmediatos y esta.
La política es la misma. Todos queremos que Petro-Perú se integre verticalmente e ingrese al ‘upstream’ [exploración y producción]. La diferencia es que a mi antecesor le dieron información falsa. Pero hoy tenemos la correcta. No ha habido giro de política [energética] sino cambio de decisiones, producto de reportes erróneos que se dieron a los anteriores directores de Petro-Perú y al ex ministro [Eleodoro Mayorga].
¿Qué intención habría en dar esa información errónea?
Pregúntenle a los que la dieron y no a mí.
¿No hay, entonces, un cambio de política energética?
En lo absoluto. Nunca lo ha habido. Me extraña esa pregunta porque fui yo quien anunció, siendo presidenta de Perú-Petro, que Petro-Perú podría participar hasta con 25% en los lotes con contratos por vencer. Esa es la política del gobierno.
¿Entonces, Perú-Petro seguirá incluyendo a Petro-Perú como socio de los operadores privados?
Por supuesto, siempre y cuando el directorio determine cuándo será conveniente y cuándo no.
Lee la entrevista completa en la edición impresa de hoy de Portafolio Negocios & Mercados.