A días de la toma de mando del próximo presidente del Perú, ya se están dando varias discusiones importantes que serán medulares para el siguiente gobierno: desde los profesionales que pertenecerán al próximo Ejecutivo, hasta qué se planteará en el corto plazo. El economista Alonso Segura conversó con El Comercio sobre los últimos anuncios.
—Esta semana hemos tenido mensajes mixtos de Pedro Castillo. Por un lado, se recibió con optimismo el anuncio de que se buscará ratificar a Julio Velarde como presidente del BCR, y por otro lado, este jueves en un mitin señaló que lo primero que solicitará este 28 de julio al Congreso es que se agende de forma inmediata la instalación de la Asamblea Nacional Constituyente “para redactar la Constitución del pueblo”. ¿Cómo percibe usted ambos mensajes?
Hay dos maneras de verlo. Una es desde el punto de vista de quien hace el mensaje, y la otra desde el punto de vista de cuál es el impacto y a quiénes va dirigido. En el primer caso pareciera ser que tienen facciones en el interior [impulsando el mensaje], o dada la posición sobre el tipo de cambio decidieron que la manera de poder controlar eso para generarse más oxígeno era anunciar la ratificación de Julio Velarde y les funcionó. El otro mensaje es necesario para sus votantes, un núcleo duro de ellos. Pero hay un problema desde la mirada de quienes reciben este mensaje; de los inversionistas, en particular. El anuncio sobre Julio Velarde puede ayudar, pero no funciona en un vacío, sobre todo si tienes una incertidumbre tan grande como un cambio total de la Constitución por mecanismos, además, que no son claros.
MIRA: Pedro Francke responde a siete economistas: “Sobre nombramientos de funcionarios [en MEF y BCR], hay que esperar” | ENTREVISTA
—¿De no prosperar la iniciativa de ratificar a Velarde en el BCR, ve que ello pueda trasladarse a una mayor desconfianza, o va a depender de otras señales que se den?
Va a depender de otras, pero Julio Velarde ya dijo básicamente que estaría dispuesto a quedarse. No ha dicho: “De ninguna manera, estoy cansado, me quiero retirar”; dijo: “Vamos a conversar”. En la práctica, ya dio a entender que bajo ciertas condiciones se queda.
“Castillo tendrá que reflejar a todo el Perú y generar puentes si quiere lograr consensos”.
—Va a ser clave cuáles otros directores se nombren en el BCR.
No sé cuáles son las condiciones de Velarde, pero lo que va a ser claro es que más adelante va a haber dos desenlaces. O se queda o no. Y si no se queda, es evidente que no cumplieron las condiciones mínimas que él solicitó. En cualquier caso, si es que después quiere irse, ahí vas a tener otro impacto.
—¿Qué condiciones piensa que podría poner Velarde para permanecer en el BCR?
Eso dependerá de él. Si me preguntas a mí, diría que quiero saber por lo menos cuáles son los directores que va a proponer el Ejecutivo, y tener voz en esos directores, porque quieres saber si puedes trabajar con una parte del directorio. Recuerda que no es el llanero solitario. Las decisiones se dan por mayoría en el directorio. Si al final tiene un directorio en contra, podría no funcionar. Luego están ciertos puestos claves en el Ejecutivo, porque tiene que ordenar políticas con el Gobierno.
“En la práctica, Julio Velarde ya dio a entender que bajo ciertas condiciones se queda”.
—Quienes lleguen al MEF, Minem, entre otros puestos técnicos…
Exacto. Y probablemente [la Presidencia del Consejo de Ministros]. También ciertas políticas, probablemente algunas referidas al banco central directamente, o tener conocimiento de algunas decisiones como si se quisiera hacer un nuevo Reactiva o lo que fuera. Además, lo fundamental para mí sería el tema constitucional.
—Una importante cantidad de seguidores de Castillo apoya una asamblea constituyente y nueva Constitución. Bajo este escenario, ¿es viable abandonar o dejar de lado esta discusión?
Creo que esa discusión es inevitable porque lo siguen anunciando. No solo con sus facciones internas, sino también con una parte de sus votantes, que no son el 50%, sino una parte del núcleo duro de [sus votantes de] la primera vuelta. Pero mientras no deslinden y digan que la discusión no va, como en algún momento lo dijo Humala, va a haber la incertidumbre de si va a darse o no. Yo creo que lamentablemente no es un tema relevante y que no es necesario. Creo que es más lo que podemos perder que lo que podemos ganar, sobre todo tocando el capítulo económico. El tema acá es que hay múltiples razones por las cuales una asamblea constituyente para una reforma integral de la Constitución sería, en mi opinión, muy negativa para el país y no solo por la incertidumbre, que evidentemente es una de las razones.
—¿Por cuáles otros motivos?
Porque no hay consensos. La gran mayoría y múltiples encuestas te han dicho que necesitamos algún cambio, algunos ajustes moderados, pero no te dicen cámbiame todo. Una facción minoritaria quiere cambiar todo y otra porción minoritaria quiere que no toques ni una coma. Por otro lado, no hay condiciones: mira los Congresos que hemos tenido y la situación política de polarización. No pareciera que hay las condiciones para tener una discusión y negociación balanceada sobre qué ajustes son los adecuados para la Constitución. A esto se suma la incertidumbre que te va a generar en toda la transición del proceso, que va a ser larga en un momento en que necesitas enfocarte en reactivar, en vacunar para terminar de combatir la pandemia. Necesitas reactivar para generar inversión y generar empleo.
LEE TAMBIÉN: Pedro Castillo: ¿Qué señales económicas esperan los inversionistas y podrían mitigar la volatilidad?
—Si bien es un debate que se tiene que dar por las circunstancias que nos explicas, ¿la pandemia es un gran factor que restringe que ocurra en este momento?
No solo la pandemia, sino los efectos de la misma. El empleo adecuado está muy por debajo de lo normal. Hay un par de miles de personas que han recuperado su trabajo, pero están en situación de desempleo. Si lo miras por el lado de informalidad, también. El ingreso promedio todavía está por debajo de lo que estaba antes de la pandemia. Es una situación bastante precaria y vulnerable de la población. Necesitas que los poderes del Estado se enfoquen [en eso] y no estén pensando en unicornios azules. Creo que la Constitución necesita algunos ajustes en la parte política e institucional; pero en la parte económica, en realidad, es más lo que puedes perder que lo que puedes ganar. No solo por la incertidumbre, sino porque podría ser perjudicial para la propia población y para los intereses del país.
Además, muchas de las cosas que se pueden hacer son políticas que permite la Constitución actual. Ahí puede haber multiplicidad de temas: programas de becas, bonos, diversificación productiva… Mucho de lo que se ha hecho y se quiere hacer ya lo permite esta Constitución. Hay que darle más fuerza; siempre hay cosas que se pueden hacer mejor. Pero no se logra necesariamente con cambios constitucionales.
“No pareciera que hay las condiciones para tener una discusión balanceada sobre qué ajustes son los adecuados para la Constitución”.
—Pedro Francke, vocero económico de la candidatura de Castillo, sí mencionó que buscarían potenciar la diversificación productiva.
Eso es correcto. Es correcto que se busque impulsar una agenda de diversificación productiva, que no es lo mismo que una agenda de industrialización. Hay un gran segmento del establishment que creía que el chorreo era suficiente, y queda claro que no lo fue. Necesitas otro tipo de políticas, pero las tienes que hacer de manera responsable, coherente y técnica. Esa ruta ya existe, es cuestión de retomarla y hacerla de la mano con el sector privado; es una agenda conjunta.
—Las condiciones externas son bastante favorables a nivel económico: países que se reactivan con fuerza, un turismo que se reactiva y un mayor dinamismo en el consumo. ¿Cómo el siguiente gobierno puede aprovechar esto en el corto plazo?
Se va a tener una mejora sustancial en indicadores económicos y sociales por lo que usted menciona, y también por efecto estadístico. ¿Por qué creció el empleo 70% en Lima Metropolitana en mayo? Porque se cayó en más del 50% en mayo del año pasado. Todavía vas a tener esos números que son monstruosos y muy favorables. Además de eso, tienes los precios de materias primas, que en el caso del Perú son fundamentales. El cobre está en picos históricos, y otras materias primas están al alza. Es un impulso vital. Sobre eso tienes una política interna que ayuda a que la inversión pública también esté caminando; en junio se ralentizó, pero te va a seguir ayudando.
—Además que en la inversión pública los niveles están similares a prepandemia.
Están por encima. Pero la inversión pública es la quinta parte de la inversión. Te puede dar unas cuantas décimas más de crecimiento, pero no es que te va a hacer el cambio.
Lo clave aquí es controlar la pandemia, desplegar la vacunación, tratar de evitar que haya una tercera ola, que todos podamos normalizar nuestras actividades y que puedas abrir el turismo; que puedan decir “en el Perú ya se vacunó a todo el mundo”. Los turistas van a querer ir a un país donde no tienen riesgo de contagio. El ritmo que se ha logrado ahora último de vacunación tiene que continuar; tenemos que salir de esto lo antes posible. Lo otro que se debe generar es actividad económica interna. Pasar la página de la pandemia es una condición necesaria para eso, pero no es suficiente. ¿Qué necesitas? Confianza e inversión privada. El 80% de la inversión es privada, es la que genera empleo. Si estás en un entorno de cambio constitucional, una parte importante de esa inversión se va a contraer o paralizar.
—¿El precio del cobre actual podría implicar que de por sí el Perú se vea favorecido por un mayor crecimiento y a la par trasladarse en una mejor recaudación?
Sí. Mira lo que ocurrió en el 2003 hasta el 2013. Es incierto si vas a enfrentar un superciclo, que dura una década, pero en el caso del cobre, pareciera que sí. Ahora: ayuda mucho, muchísimo, pero no es suficiente. Recuerda que la minería donde más impulsa es en la fase de inversión. En este momento, cuando termine Quellaveco (2022), no tienes otro gran proyecto que esté en ejecución. Hay varios proyectos, ninguno realmente enorme en el corto plazo, pero hay varios que están en compás de espera. El superciclo impulsa también por la inversión y por todo el efecto arrastre sobre otros actores. Entonces, lo vas a aprovechar si con esas buenas perspectivas lograr generar mayor inversión minera, que va a generar mayor capacidad productiva a futuro.
MIRA: La ratificación del CPTPP en manos del Congreso: ¿Cuánto suma este nuevo acuerdo al Perú?
—En una reciente entrevista a este Diario, Francke consideró que un gobierno de Pedro Castillo estaría en mejor posición para resolver conflictos sociales que hoy implican un retraso de proyectos mineros. ¿Cree que el futuro gobierno tendrá las herramientas para lidiar con estos aspectos de una forma efectiva?
Es el gobierno mejor posicionado para hacerlo porque tiene el 90% de respaldo en esos corredores mineros. Es el gobierno que tiene la mayor probabilidad de sacar adelante los proyectos. Estamos hablando de un portafolio de proyectos mineros; eso es lo que tienes que buscar. No solo podemos decir que se le subirán los impuestos a esas industrias, hay que ser muy cuidadoso. La prima de riesgo del Perú ha subido: así no hagas nada, tu valla para invertir en el Perú es más alta. Parte de eso lo puedes tratar de revertir si solucionas el tema tributario en el sector minero de manera razonable; probablemente no les va a gustar, pero no hay que matar al sector. Hay que entender las dos partes y encontrar un punto medio.
— Justamente una de las propuestas más concretas hasta el momento que ha transmitido Francke, y que se daría en un eventual gobierno de Castillo, es la de aumentar el impuesto a la sobreganancia minera. ¿Considera que es tan factible como se plantea? ¿Cómo lo implementaría usted?
Acá hay un tema de negociación, porque las mineras tienen contratos de estabilidad tributaria. En adelante los puedes cambiar, los nuevos que quieran tendrán que pagar las nuevas tasas y si creen que no les da no invertirán. El tema es con quienes ya tienen contratos de estabilidad, que no se pueden desconocer. Yo haría un planteamiento. El impuesto progresivo sobre utilidad operativa ya existe, si gano X pago una cierta tasa, pero si gano 2X, pago una tasa más alta por diferencial. Eso ya está en el sistema. Se tienen que aclarar dos aspectos: primero, ajustemos esas tasas, agreguemos un nivel más o cambiémoslas. Lo otro es cambiar la tasa de la regalía. Lo importante ahí es que sea negociado y aceptado de forma voluntaria. Es fundamental por eso el rol de la sociedad y de las mineras, que estas últimas entiendan que no estamos en una situación de primer mejor para nadie en el país. Acá se trata de lograr algo que si bien será menos rentable de lo que imaginaban, los mantiene viables y con buenas perspectivas y permita que siga habiendo inversión en el país.
—Francke ha comentado también que pondrán el foco en repotenciar a la Sunat y sus capacidades para fiscalizar la evasión y elusión tributaria. ¿Qué mecanismos piensa que son importantes para que ello se concrete?
Los mecanismos ya existen. Las bases se sentaron hace tiempo, cuando se plantearon programas con la OCDE, una parte importante era toda la agenda tributaria. Dentro de eso habían dos grandes componentes: uno es la norma antielusiva general, que finalmente la tenemos y debe aplicarse. El objetivo de esta ley es disuasivo. Pero se requiere una estrategia para que los elusores entiendan que la Sunat tiene las herramientas para detectar y sancionar ese tipo de prácticas. Por eso creo que hay que usarla de mejor manera. Por otro lado está toda la normativa y tratados que hemos firmado. [...] El mundo se está moviendo al esquema de compartir información, y por eso es más difícil como elusor esconderse. Todo eso ya viene de tiempo atrás. Además es importante mantener la fuerte inversión de tecnología en el Perú para los sistemas tributarios. Todo eso ya está en marcha. Se tiene que continuar, porque el cambio tecnológico todos los años es exponencial.
—Para usted, ¿qué mensajes serán claves a nivel económico de cara a transmitir calma a una población que actualmente duda sobre lo que pueda hacer el siguiente gobierno con la economía?
El gran tema es la Constitución. Se debe dar tranquilidad de que se buscará amplia discusión y consenso sobre temas acotados, y no cambiar todas las reglas de juego. Por otro lado, la pandemia: tiene que haber claridad sobre que esto continúa y mantener los esfuerzos sin cambios abruptos. Se necesita continuidad y acelerar lo que se está haciendo. Si algo está funcionando, hay que empujarlo más. Lo tercero es que el propio Castillo zanje y deje claro que no habrá nacionalizaciones, estatizaciones ni nada por el estilo. Llegar a un acuerdo con el sector minero debe ser rápido. Por otro lado, y esto repercute hacia afuera, es que sea claro quién va a presidir el BCR, quiénes van a ser sus directores, que se vea estabilidad ahí y razonabilidad en ese directorio, porque este tiene un poder muy grande de decisión. También se debe buscar un gabinete de consenso. Quien gana lo hace por un pelo, y no se puede imponer una agenda de esquina. Se necesita un gabinete que se perciba de consenso, represente a los distintos segmentos de votantes, y que las autoridades se perciban como razonables y competentes.
LEE TAMBIÉN: Propuesta de Asamblea Constituyente genera incertidumbre en el país, sostiene extitular del MEF
—¿Qué debería ocurrir en el ámbito fiscal, de cara a asegurar la responsabilidad que ha caracterizado al manejo macroeconómico del país?
Se tienen que restablecer las reglas fiscales. No digo que eso implique que volveremos al 1% de déficit fiscal el 2022. La trayectoria de convergencia debe ser razonable y debe haber intención de cumplirla. Si hay algún ‘downgrade’ en la calificación crediticia, es por lo que estamos viendo hoy: suspensión de reglas fiscales sin justificación y lo que está haciendo el Congreso. La parte fiscal es fundamental.
—¿Considera que la incertidumbre económica y la volatilidad que esta pueda generar, arrinconará al futuro gobierno con respecto a las decisiones que busquen tomar?
Podría, pero el siguiente gobierno tiene una ventaja: van a estar en un horizonte de 12 a 18 meses con vientos externos tan fuertes que te pueden mitigar en gran parte las visiones internas. Es distinto un gobierno que entra con vientos en contra, y eso te lo digo por experiencia. [...] Lo clave aquí es que en sus políticas, decisiones y nombramientos, Castillo tendrá que reflejar a todo el Perú y generar puentes si quiere lograr consensos, así como estabilidad y gobernabilidad, porque parte con un gobierno débil. No se trata de que gane su fortaleza atropellando a todo el mundo. Su tarea es recuperar al Perú de los efectos de esta pandemia y para eso necesitas consenso, inversión, y empleo; no ideologías, ni agendas de esquina. Se necesita generar gobernabilidad en el país.
SUSCRÍBETE A NUESTRO NEWSLETTER AQUÍ
Contenido Sugerido
Contenido GEC