Comisión de Trabajo: Hasta tres dictámenes sobre sueldo mínimo y un 97% que carecen de validez técnica

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Tras una revisión a las 63 fórmulas que están listas para debatirse y podrían aprobarse en el Pleno en la presente legislatura, El Comercio detectó que el 73% de las fórmulas se aprobaron pese a que recibieron opiniones desfavorables u observaciones, mientras que otro 24% tuvo luz verde aun cuando no se esperó al análisis de las entidades técnicas o no se especificaron los comentarios recibidos.

El bloque de izquierda muestra un gran interés por la agenda laboral, pues tenemos que las bancadas de Perú Libre y Cambio Democrático-JP son las que más proyectos han presentado. En las agendas individuales, cuatro de los cinco parlamentarios con mayor número de iniciativas pertenecen también a grupos de izquierda.

Alejado de lo técnico

La Comisión de Trabajo ha tenido una labor muy separada -y hasta confrontacional- a la de la Comisión de Economía, pese a que ambos grupos han tenido que dictaminar los mismos temas. Un ejemplo de esto último es la reforma del sistema de pensiones, donde a la fecha existe un dictamen de cada comisión. En el caso de Trabajo, su fórmula ha recibido opiniones desfavorables de los ministerios de Economía, Educación, Cancillería y hasta de la Presidencia del Consejo de Ministros.

El problema con la Comisión de Trabajo no solo ha sido con los dictámenes antitécnicos. También se observa un trabajo desordenado, como en el tema de ajustes al procedimiento para determinar la Remuneración Mínima Vital. A la fecha, el grupo de Trabajo tiene dos dictámenes y un proyecto que tienen pendiente de estudio. Todos sobre la misma temática.

Para Luis Santa Cruz, consejero del área laboral del estudio Miranda y Amado, se espera que el trabajo de la comisión siga centrándose en darle beneficios al trabajador descuidando el verdadero problema de fondo: la informalidad. “En el caso de la Remuneración Mínima Vital, no se ha estudiado cuál va a ser el impacto de su incremento con respecto al nivel de informalidad en el país. Eso es algo que preocupa. Somos un país que tiene una serie de buenos derechos laborales, pero si no arreglamos la informalidad tendremos derechos a los nadie va a tener acceso. Los proyectos de ley de los que más se hablan son los feriados”, aseveró.

Mónica Pizarro, socia del estudio Echecopar, coincide con la práctica legislativa que ha mostrado esta comisión. “Parece que hubiera la idea de que es mejor mientras más proyectos se presenten y aprueben, sin importar si esto tiene coherencia técnica o si es positivo para el sistema de leyes laborales. Las normas que se aprueben deben se relevantes. Como no hay criterio técnico, se plantea aprobar feriados sin tomar en cuenta el impacto económico de estas medidas. Lo que debería hacerse, por ejemplo, es hacer una revisión integral que nos lleve a un número de feriados más razonable”, aseveró.

Es así que, para Pizarro, resulta preocupante que el trabajo de la Comisión de Trabajo se mantenga desconectada de la política del Ejecutivo y también del Consejo Nacional de Trabajo. “Lo lógico sería que cualquier propuesta legislativa, más aquellas que involucren reformas importantes, pasen en consulta en el Consejo Nacional de Trabajo. Esto como parte del procedimiento legislativo. Es una práctica que no se está ejecutando”, expresó.

*Si bien es una bancada nueva, se considera la sumatoria de iniciativas de sus miembros.

Pasión Dávila, un nombramiento de golpe

El Bloque Magisterial eligió al legislador Pasión Dávila como su representante para presidir la Comisión de Trabajo. El legislador izquierdista es recordado por haber golpeado a su colega Juan Burgos en el hemiciclo del Congreso, una agresión que le costó 120 días de suspensión.

En declaraciones ante la prensa, Dávila ha minimizado la agresión e incluso sostuvo que fue un incidente “positivo” porque todos se han “corregido” y ahora los “respetan”.

Dávila tendrá que cruzarse con el colega que agredió. Esto debido a que Juan Burgos es el congresista que más proyectos acumula en materia laboral, y varias de sus iniciativas están pendientes de dictaminar, y para esto deberá asistir a sustentar sus propuestas en el grupo de trabajo que ahora liderará su agresor.

El perfil del nuevo presidente

El elegido para presidir la Comisión de Trabajo, Pasión Dávila (Bloque Magisterial), no muestra haber tenido a la agenda laboral entre sus prioridades. Este Diario detectó que, de los 31 proyectos presentados por Dávila Atanacio, solo dos iniciativas están referidas a un tema laboral.

Dávila, educador de profesión, ha presentado un proyecto para garantizar el derecho laboral de los docentes contratados con más de tres años de servicio.

Esta fórmula laboral de Dávila se aprobó en la Comisión de Trabajo pese a que el Ministerio de Educación indicó que “la propuesta contraviene los principios de igualdad, mérito y capacidad establecidos en la Ley de Reforma Magisterial” y que “el proyecto de ley debe incluir un análisis costo beneficio respecto a la implementación de la propuesta”. Dicha iniciativa se aprobó en el Pleno, pero se presentó una reconsideración a la votación que se encuentra pendiente de resolver.

Asimismo, la semana pasada presentó un proyecto de ley que deroga un artículo de la Ley de Negociación Colectiva en el sector público. Concretamente, el artículo a derogar plantea que los trabajadores no sindicalizados abonen por única vez un monto a modo de compensación de los gastos generados durante la negociación colectiva. Dicho monto, según detalle el artículo, no debe superar el 0,5% de la remuneración mensual del trabajador.

El parlamentario autor del proyecto interpreta que esta medida representa “un castigo a quien no esté afiliado al sindicato que participa de la negociación colectiva o que esté afiliado a otra organización sindical”. Con lo cual, vulnera el derecho a la libre afiliación. La iniciativa ha sido derivada a la misma Comisión de Trabajo del Congreso que él preside.

Cabe recordar que, en la Comisión de Economía, está pendiente de dictaminar su propuesta de ley para “nacionalizar el recurso estratégico del litio y sus derivados”. Vale decir también que el 43% de sus 30 iniciativas son declarativas.

Tras ser elegido como presidente de la comisión de Trabajo del Congreso, Dávila dijo que el trabajo de la comisión se centrará en el trabajador e incluso hizo referencia a la remuneración que un sector de ellos percibe.

“Nuestro compromiso es con la clase trabajadora, desde las trabajadoras del hogar hasta los obreros de las empresas mineras que día a día entregan su vida por un sueldo que no es recompensable con el trabajo que hacen”, sostuvo.

A su turno, la parlamentaria Isabel Cortez instó a dejar de lado los colores políticos y apostar por la defensa de todos los trabajadores. Dijo que durante décadas se han venido haciendo leyes en contra de la clase trabajadora que afecta a mujeres y madres de familia jóvenes.

Las congresistas Isabel Cortez Aguirre (Cambio Democrático - Juntos por el Perú y ex presidenta de la misma comisión) y Cruz Zeta Chunga (Fuerza Popular) acompañan a Dávila en la mesa directiva de la comisión como vicepresidenta y secretaria, respectivamente. Antes de levantar la sesión, la comisión acordó sesionar los martes en el horario de las 16:30 horas.