El Perú se mantiene en vilo tras la llegada de una posible crisis alimentaria. Para la revista británica The Economist, la eventual escasez de alimentos respondería a la insuficiencia de fertilizantes para atender la gran demanda, problema que se viene arrastrando desde el inicio de la pandemia por COVID-19, y ahora por la invasión de Rusia a Ucrania.
El conflicto bélico ha perjudicado la comercialización de productos alimentarios y ha provocado el alza en el precio de los combustibles y fertilizantes, lo cual ha impactado duramente a la economía peruana y por ende, los bolsillos de los hogares.
¿Cuántos peruanos podrían verse afectados con la crisis alimentarias?
La amenaza de una catástrofe alimentaria podría tener consecuencias aún más drásticas en el Perú. Según, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), calculó que por lo menos 15.5 millones de los casi 33 millones de peruanos podrían verse duramente afectados.
No obstante, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) al 2021, serían aproximadamente 18 millones de peruanos los más afectados por una eventual crisis alimentaria, ya que se encuentran en situación de pobreza y vulnerabilidad.
En esa línea, Carolina Trivelli, asesora de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), explicó que el problema en el país no es haya una escasez de alimentos como tal, sino que existan personas que no pueden acceder a la comida que necesitan por factores como las condiciones de pobreza, características del mercado laboral y la forma en la que se están distribuyendo los alimentos.
“Eso es lo que debería estarnos preocupando, no solo entender las causas, sino cómo ayudando a que las personas más vulnerables puedan acceder al mínimo consumo de alimentos. Este es un problema grave que afecta a la sociedad peruana y todos debemos ayudar desde donde nos toca. Necesitamos una acción definida”, señaló en una entrevista con RPP.
¿La crisis alimentaria ya llegó al Perú?
Carolina Trivelli señaló que la crisis alimentaria ya afecta al Perú y “se ha venido gestando desde hace años”; sin embargo, se ha agravado con la pandemia y el incremento de los precios mundiales a causa de la inflación.
Además, alertó que esta crisis “se va a alargar varios meses más e incluso podría llegar hasta el próximo año”. La especialista señaló que a esto se agrega los problemas para el acceso a los fertilizantes que podría generar problemas en la producción de alimentos en el Perú y en otros países se vea afectada.
“El precio y el acceso a los alimentos va a seguir siendo un problema. Entonces, hoy día ya no es simplemente una crisis momentánea, es una crisis que va a acompañar un buen tiempo y que está afectando crecientemente a muchas personas, pero sobre todo afecta a aquellos que están en situación de mayor vulnerabilidad”, indicó.
Sin embargo, algunas autoridades se han pronunciado diciendo que el país no sufriría de escasez de alimentos, tal es el caso del presidente del Consejo de Ministros, Aníbal Torres, quién descartó que la hambruna afecte al Perú
“La inseguridad alimentaria es mundial, se dice que va a haber una hambruna general. Pero el Perú no va sufrir de eso, porque vamos a tomar todas las medidas a fin de que eso no ocurra. No nos va a faltar qué comer. Pronto vamos a desarrollar un consejo de ministros dedicado solamente a la seguridad alimentaria”, expresó durante conferencia de prensa semanas atrás.
¿Cómo influye la escasez de fertilizantes?
Es importante mencionar que debido a los conflictos internacionales, la urea ha subido de precio hasta en un 30%, lo cual ha complicado la adquisición de este fertilizante, de suma importancia para el sector agrícola.
Dicho esto, la campaña agrícola 2022-2023 se encuentra en riesgo debido al déficit de fertilizantes. Solo en el primer trimestre de este año, la adquisición de este producto cayó en 84% respecto a similares periodos de años anteriores.
“Podemos llegar a agosto (el inicio de la campaña) con un déficit de fertilizantes, y eso implicaría la caída entre el 30% y 40% de la producción agrícola. Eso después ocasionará un incremento de precios en los productos”, señaló Eduardo Zegarra, investigador de Grade.
Cabe destacar, que Perú es el segundo país en Latinoamérica y el Caribe que más depende de las importaciones de fertilizantes de Rusia, y este último ahora es un mercado paralizado a raíz de la guerra con Ucrania. En ese escenario, el Ministerio de Desarrollo Agrario peruano informó que 13 de las 24 regiones con producción agrícola ya han reducido sus áreas de cultivo por falta de fertilizantes.
El impacto de la escasez de fertilizantes se verá reflejado en un aumento considerable de los precios, el cual se ha ido observando en los últimos meses en distintos productos de la canasta básica alimentaria.