A inicios de la pandemia, la Defensoría del Pueblo emitió un informe en el que resaltó la importancia de una buena gestión de residuos sólidos durante la crisis sanitaria. Del mismo modo, el Programa para el Medio Ambiente de las Naciones Unidas (PNUD) sostuvo entonces que la buena gestión de los residuos sólidos podría evitar impactos secundarios en la salud de las personas. Por ello, se hacía un llamado a mejorar las estrategias e intervenciones en materia de gestión integral de estos residuos.