Mario Mongilardi: "Falta aterrizar planes para pymes”

Mario Mongilardi asumió hace tres semanas la presidencia de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), que agrupa a 14 mil empresas. Al frente de este gremio, espera con ansias otro cambio de mando: el que ocurra en Palacio de Gobierno el 28 de julio.

— ¿En qué se ha trabajado con el actual gobierno?
La administración actual no ha sabido escuchar al sector privado. Tampoco nos han convocado. Hemos visto muy poca actividad en la lucha para reducir barreras burocráticas.

— ¿Qué espera entonces del siguiente?
Espero que el próximo gobernante entienda que una empresa no puede esperar cuatro años para hacer una inversión, pues se va a otro país donde puede hacerlo en dos. Un empresario nacional no puede esperar un año por una licencia para hacer una inversión porque su vecino la hace sin permiso y pasa a ser parte del sector informal.  

— En ese sentido, ¿siente que un candidato [Keiko Fujimori o Pedro Pablo Kuczynski] tiene más propuestas para el sector pyme que otro?
Las propuestas de los dos candidatos que hemos revisado están a nivel de idea, todavía les falta aterrizar. Nos llama la atención el pragmatismo de ambos. No estamos hablando de propuestas revolucionarias, sino más bien encuadradas dentro de un modelo de desarrollo que tenemos desde hace 25 años y que creemos que debe continuar.

— ¿Qué respuesta inmediata espera?
El nuevo gobierno tiene que dar señales claras en sus 100 primeros días sobre cuál es el rumbo que va a tomar. Estamos trabajando en un programa para los primeros 100 días que vamos a poner en manos del candidato que sea elegido presidente.

— ¿En qué consiste el plan?
Está en elaboración pero, paralelamente a este, tenemos un programa económico que ya hicimos público y estamos trabajando en otro que pueda facilitar las trabas que tenemos en el sector tributario y en la exportación. 

— ¿Cuál es el objetivo de estas propuestas?
Entre otras cosas, reducir la pobreza mediante el empleo, pero si crecemos a un ritmo de 3% no lo vamos a lograr. Tenemos que retomar [el ritmo de crecimiento de] 5% o más. Hay que luchar contra la frondosa burocracia y las enormes barreras administrativas.

— ¿Identifica otra problemática? 
El Perú está retrocediendo en lugar de avanzar en competitividad. Por ejemplo, no somos competitivos en la cadena logística. No es aceptable que algunos productos agroindustriales tengan costos logísticos de 50%.

— ¿Cómo salir de esto?
Tenemos que caminar hacia un mayor grado de industrialización de productos y  crear un marco que permita la inversión. La forma de cambiarlo, para nosotros, es que los sectores se abran para la participación privada. 

— Existe rechazo ante la privatización.
No hablo de privatización, sino de inversión. El 75% de la inversión en el Perú la realiza el sector privado. Solo el 25% corresponde al Estado. Si tú [Estado] no puedes construir un hospital, ¿por qué no me dejas construirlo a mí?

— Hablando del sector salud, en el que tiene experiencia, ¿qué propondría?
Tenemos una burocracia inmensa que se llama Digemid [Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas] que no nos permite avanzar. Les calculo unos 10 mil expedientes que no han sido resueltos. La consecuencia es que tenemos menos productos en el mercado. A menor oferta, los precios suben. 

— Sobre esto, cuando era presidente del comité de salud de la CCL, manifestó estar a favor del TPP (Acuerdo de Asociación Transpacífico), pero que “había que tener los conceptos claros”. 
El TPP es un tratado que agrupa a grandes y pequeñas economías. Quienes hicieron la negociación fueron las grandes economías, las pequeñas como nosotros tuvimos que adaptarnos y aceptar. El balance general es que va a ser muy beneficioso para el país porque nos abrirá la posibilidad de acceder a mercados muy grandes. 

— Sin embargo, la protección de datos de prueba para los medicamentos biológicos ha generado controversia.
El principal impulsor de la protección de los datos de prueba de los biosimilares ha sido Estados Unidos. Nosotros tenemos un TLC con ellos y este ya establece la protección de las patentes, mas no de los productos biológicos. 

— Entonces, ¿el TPP sería finalmente beneficioso? 
El acuerdo ya se firmó, no hay nada que cambiar y no veo posibilidades de que se pueda renegociar. Lo que podemos hacer es trabajar en nuestra reglamentación interna para beneficiarnos.