El ministro de Energía y Minas, Luis Miguel Incháustegui, planteó un nuevo enfoque para la minería en el país, priorizando el desarrollo sostenible y la lucha contra la pandemia del COVID-19.
“La situación actual que estamos pasando con el COVID-19, demanda que este sector [minero-energético] articule mejor la ayuda que se está dando para combatir la pandemia. Quiero darle un enfoque más social”, indicó el titular del Minem en diálogo con Agenda Política de Canal N.
La posición de Incháustegui parece contrastar con el discurso que enunció el ex primer ministro Pedro Cateriano ante el pleno del Congreso de la República, cuando buscaba el voto de confianza. Dicho mensaje recibió múltiples críticas desde diversas fuerzas políticas, quienes le acusaban de promover una agenda “pro minera”.
Incháustegui anunció que el cambio de enfoque se hará evidente en el discurso del nuevo presidente del Consejo de Ministros, Walter Martos, que promoverá los proyectos mineros, de hidrocarburos y energéticos, bajo una mirada más sostenible.
“El énfasis está ahora en la salud y cómo todas las actividades y las industrias ayudan a combatir esta pandemia”, anotó.
El titular del Minem indicó que la “columa vertebral de la economía” no es, particularmente, la minería, sino el desarrollo sostenible de las diversas actividades en el país.
“La columna vertebral del Perú tiene que ser el desarrollo territorial que se debe dar en el país, el desarrollo sostenible. La minería es una actividad importante, pero no podemos priorizar solo una actividad y dejar las otras”, advirtió.
Sobre la lucha contra el coronavirus, apuntó que las compañías mineras tienen una ventaja operativa al hallarse cerca de comunidades en lugares poco accesibles.
“El sector extractivo tiene presencia en las partes altas y las zonas más afectadas, las cuales son más vulnerables. Sabemos que las empresas están haciendo ciertos apoyos y muy valiosos, pero lo que se demanda es unidad, mayor solidaridad”, observó Incháustegui.
Para ello, sugirió la ampliación de la Operación Tayta, cuyo objetivo es proteger a las poblaciones vulnerables, al sector extractivo.
Por último, subrayó que un objetivo de su administración será reforzar la oficina de gestión social y lograr una mayor coordinación con el Viceministerio de Gobernanza de la PCM para prevenir conflictos sociales en lugar de “apagar incendios”.