El ministro de Vivienda, Construcción y Saneamiento, Francisco Dumler, enfatizó los esfuerzos que realiza el Gobierno Central a fin de que los gobiernos locales den poderes a su despacho para nombrar directorios y gerencias de calidad en las empresas prestadoras de servicios de agua y saneamiento (EPS).
— ¿En que situación se encuentra el sector de agua y saneamiento?
Acá hemos tenido una evaluación de una calificadora y el mensaje importante es: En un ordenamiento de las empresas prestadoras de servicios de agua y saneamiento (EPS), tienes tres empresas que pasan la valla y te digo que son excelentes: Sedapal de Lima, Sedapar de Arequipa, y la de Cusco, pero mientras estas tres se acercan al límite mínimo permisible, las otras 47 EPS están al fondo de la tabla.
— ¿Las 47 EPS adolecen de falta de capital?
Todas tienen unas clasificaciones que, puesto en sencillo, ninguna sería capaz de soportar un préstamo de un banco. Ninguno le prestaría con esos indicadores financieros. Muchas de ellas tienen su estructura de capital comprometida más allá de su estructura de deudas y ninguna tiene la capacidad de realizar inversiones importantes para garantizar el servicio en los próximos años.
— ¿Tan mal se encuentran las empresas?
Si no usas recursos para inyectar a estas empresas, el sistema estaría mucho mas colapsado de lo que está. Allí, lo que necesitas es cambiar este sistema de gestión de EPS que lleva ya más de dos décadas. No necesariamente el habérsela entregado a los gobiernos locales ha sido una medida que haya mejorado la eficiencia.
— ¿Qué propone el ministerio para mejorar el gobierno corporativo de las EPS?
O ingresamos con un régimen de administración temporal (RAT), en el cual tú nombras un gobierno corporativo de calidad, o promueves una iniciativa privada –sea cofinanciada o autosostenible– que se encargue de la gestión. En cualquiera de los casos, el tema no va a impactar el sistema tarifario. Si traemos a una empresa especializada y mejora la eficiencia (hoy las EPS cobran el 50% de lo que producen), la ganancia del operador está en ese incremento de eficiencia, con lo cual se pueden garantizar sus ingresos y mejorar el servicio.
— Con relación a las iniciativas privadas, ¿cuál es la que está en etapa más avanzada?
La que está en mayor grado de avance es la de las plantas de tratamiento de aguas residuales en el departamento de Puno. Esperamos que muy pronto el proyecto sea declarado de interés.
— Hablando de concesiones, ¿cuál es la situación de la EPS de Tumbes?
Renegociamos. En Tumbes, hay una concesión con Atusa (Aguas de Tumbes), mediante la cual hace algunos días los municipios [locales] han otorgado poderes al ministerio para que nosotros, a nombre de ellos, sigamos llevando la concesión. Vamos a renegociar la concesión con Atusa; ello debería permitir, además, hacer un plan ordenado de inversiones.
— ¿Por qué, tras diez años, la concesión no ha tenido éxito?
La modalidad no fue la mejor. Una toma de decisiones de inversión por parte de Atusa atravesaba por negociar en simultáneo con los tres municipios. Un municipio bloqueaba al otro y así sucesivamente en temas de decisiones de inversión.
— Entonces, en adelante la concesionaria negociará con ustedes el plan de inversiones y ya no con los municipios
Sí. El primer borrador de este plan de inversiones va a ser presentado el 30 de noviembre en Tumbes.
— ¿Qué empresas se van a acoger al régimen de administración temporal (RAT)? Moquegua ya se acogió al mecanismo y se vienen varias en camino. Está en carpeta la de Pucallpa. Es gigante y tiene los peores indicadores de gestión. Como sistema está colapsado, pues fue pensado para una ciudad de cien mil habitantes y hoy tiene medio millón de personas. Sedaloreto (EPS de Loreto) también se acogería a este mecanismo. Hay una propuesta conversada con los alcaldes de San Juan Bautista, Belén y Maynas.
— ¿Qué proyectos de agua y saneamiento están a punto de iniciar operación?
Uno de los más importantes es la planta de tratamiento de aguas residuales de La Chira. Junto con la planta de Taboada, esta inversión permitirá tratar el 95% de las aguas residuales que Lima vierte al mar. La Chira se inauguraría la primera semana de enero.