El presidente ejecutivo de Indecopi, Julián Palacín, señaló este jueves en una entrevista a TV Perú que al menos el 48% de los nombramientos de vocales en salas resolutivas de la institución debían ser investigados para deslindar responsabilidades de un presunto conflicto de interés. Esto, porque desde el 2016 se registran vocales que realizan también labores en el sector privado y en estudios jurídicos.
El tema surge a raíz de una resolución de la Sala Especializada en Defensa de la Competencia (SDC) de Indecopi que dejó sin efecto la sanción contra la empresa Panificadora Bimbo del Perú S. A. por comercializar su producto de pan blanco sin bordes sin incluir la advertencia de que contenía grasas trans.
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Indecopi informó posteriormente, mediante un comunicado, que uno de los miembros de la SDC que revisó el mencionado caso era Silvia Hooker, también gerenta de Asuntos Internacionales de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), lo que representaría un conflicto de interés.
Además, el comunicado señaló que Palacín solicitó al Órgano de Control Institucional (OCI) del Indecopi que se evalúe e investiguen las declaraciones juradas de intereses de los vocales y comisionados por presunto conflicto de interés.
El 18 de octubre, la SNI informó que Hooker suspendió sus actividades como gerenta de Asuntos Internacionales.
A su vez, Bimbo indicó mediante un comunicado que sigue los conductos regulares y cumple con las disposiciones, normativas y regulaciones de los países donde opera. “La compañía siempre acatará lo que decidan las autoridades pertinentes”, expresó.
¿Cómo se manejan las salas resolutivas?
Pierino Stucchi, socio principal del estudio Muñiz, explicó que Indecopi, desde sus inicios en 1992, cuenta con funcionarios que no laboran a tiempo completo dentro de las instancias de resolución de casos.
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Es decir, en las comisiones (primera instancia) y en las salas resolutivas (segunda instancia), los vocales trabajan a tiempo parcial.
“Se reúnen una o dos veces por semana, dos o tres horas, cada vez, y allí resuelven los casos que se ponen en su conocimiento. Se reúnen también para tener las audiencias de las partes y decidir”, señala.
Es así que, según Stucchi, es natural que tengan otras labores profesionales.
¿Conflicto de interés?
Palacín informó que el caso de Hooker se encuentra en la secretaría técnica de la Presidencia del Consejo de Ministros y en la OCI.
Además, respecto al 48% de nombramientos con presuntos conflictos de interés que mencionó, sostuvo que vienen preparando la información correspondiente, dado que la Contraloría podría solicitarla.
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“Lo primero que se debe evitar es el conflicto de intereses. Los vocales no son a tiempo completo, ellos reciben dietas, trabajan en Indecopi y, ¿qué hacen después de trabajar en Indecopi?”, declaró a TV Perú y añadió que Indecopi entrará en una reestructuración interna durante su gestión.
Según Stucchi, el caso mencionado y otros similares no representarían un conflicto de interés, dado que los vocales informan sobre sus labores a Indecopi.
“Indecopi, cuando la designa [a Hooker], naturalmente ha tenido a la vista su currículum. [...] La institución sabía que la funcionaria trabajaba en un gremio, por lo que en el fondo no hay nada de qué sorprenderse”, afirma.
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Asimismo, precisó que en el 2008 se hizo una reforma en Indecopi para prever que también los vocales puedan ser contratados a tiempo completo. Sin embargo, indicó que la institución no ha podido recurrir a esta opción ante la falta de presupuesto.
Agregó que si se busca hacer una reforma integral en Indecopi para evitar situaciones similares, se puede contratar personal de planta a futuro, aunque advirtió que no se puede castigar ni sancionar con efectos retroactivos a los funcionarios que actuaron según las normas vigentes.