El 25 de septiembre, la empresa estatal Petro-Perú informó que había cumplido con presentar el Estudio de Riesgos y el Plan de Respuestas a Emergencias respecto a la Nueva Refinería de Talara. Además, aseguró que contaban con los permisos y aprobaciones exigidos por la legislación peruana.
Esto, a raíz de un incendio que se registró el viernes 22 de septiembre en la Unidad de Craqueo Catalítico Fluidizado de la refinería.
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La estatal petrolera indicó que no hubo daños personales o materiales de consideración por el incendio. Y, aunque se ha presentado un Estudio de Riesgos y Plan de Respuestas de la refinería, este aún no ha sido aprobado.
Situación
Para entender ello, cabe remitirse al Decreto Supremo 003-2023-EM, publicado en febrero de este año, que permite a Petro-Perú operar las instalaciones de refinación o procesamiento de las que es titular, como lo es la Refinería de Talara, por 18 meses, siempre y cuando se cuente con un Plan de Atención de Respuesta a Emergencia y una póliza de seguros.
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Consultado por este Diario, Petro-Perú señaló que actualmente tienen su Estudio de Riesgos Integral y Plan de Respuesta a Emergencias de la Nueva Refinería de Talara, cuyos documentos están siendo revisados por los equipos especializados de la estatal petrolera y el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin).
Por su lado, Osinergmin señaló a este Diario que el estudio de riesgos y el plan de respuesta de emergencias presentado por Petro-Perú ya fueron evaluados. Posteriormente, se le solicitó a la estatal petrolera mayor precisión en los contenidos de los documentos para que estos sean evaluados nuevamente.
De ser aprobados los estudios de riesgo y planes de respuesta de emergencia, se permitirá a Petro-Perú tener la inscripción en el Registro de Hidrocarburos, para la Refinería de Talara.
Para marzo, el titular del Ministerio de Energía y Minas (Minem), Óscar Vera, indicó a El Comercio que la Refinería de Tamara no contaba con un estudio de riesgos actualizado, pero que el decreto supremo les iba a permitir vender los productos derivados del petróleo producidos en la refinería.
Reacción
Arturo Vásquez, director de Gerens y exviceministro de Energía, recordó que, bajo la regulación normal, Osinergmin tiene que dar la garantía y el registro de hidrocarburos para que una refinería opere, pero que en el caso de la Refinería de Talara, el gobierno le permite operar durante ese proceso, con los riesgos que implica ello.
“[Los requisitos] se hacen para evitar los incendios que se han generado en la Refinería de Talara, porque las plantas tienen que pasar por un montón de pruebas y estas tienen que ser supervisadas por Osinergmin y por el OEFA”, agregó.
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Por esta “relajación” en los requisitos de seguridad, indicó, ocurrieron casos como el derrame de hidrocarburos de la plataforma de Deepwater Horizon en el Golfo de México, en el 2010.
“Eso puede generar riesgos y estos se pueden transformar en accidentes. Para prevenir eso, lo mejor sería seguir todo el proceso normal, que se pare la planta y se haga todo el trabajo [de evaluación], como se hace con otras empresas”, acotó.
Por su parte, Erick García, experto en energía e hidrocarburos y ex director general de Hidrocarburos del Ministerio de Energía y Minas, consideró que este caso de la Refinería genera una oportunidad para pensar cuál debe ser la evaluación para los grandes proyectos de hidrocarburos, así como cuál debe ser el rol de Osinergmin.
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“Generalmente, los proyectos de gran envergadura se manejan con licencias a cargo de empresas internacionales. Si ocurre algo, ellos asumen todo. El tema de la refinería nos tiene que hacer repensar cuál sería el rol del Osinergmin, si será el mismo rol para unidades menores o amerita que exista un sistema internacional donde la empresa que quiera, asuma, con póliza de seguro y con licenciantes autorizados, la construcción”, expresó. Agregó que este nuevo rol también implica establecer “nuevos candados” en la seguridad industrial.
Ello podría aplicarse para otros proyectos detenidos, como la planta de abastecimiento de la empresa Valero en Paita o la planta de almacenamiento de Monteazul en Lurín.
Además, García sostuvo que, por transparencia, Osinergmin debería informar sobre el manejo de esta supervisión de los proyectos, así como los resultados que se tienen y las empresas que cumplen o no con los requisitos.