El ex rector de la UPC y presidente ejecutivo de la cadena Futura Schools, Gonzalo Galdós, dice que la calidad de los docentes no es la adecuada y cree que debería permitirse que otros profesionales puedan ejercer la enseñanza.
—En el marco de CADE 2016, ¿qué problemas cree que afronta la educación peruana?
El primero es un reto de cobertura, hay una cobertura heterogénea en el país. Es decir, no todas las familias peruanas y sus hijos tienen acceso a una educación de mínima calidad. El segundo, hay un gran problema de informalidad en la educación privada que debe corregirse, eso incluye que debe cerrarse a los malos. Tercero, la curva de desarrollo debe acelerarse, si bien hay mejoras incrementales estas deben ser radicales. Eso significa saltos dramáticos en temas como metodología, profesores más capacitados y mayor participación del sector privado.
—¿Cómo evalúa la labor del ministro Jaime Saavedra en esta parte de su segunda etapa?
Creo que es muy poco lo que se ha avanzado en la etapa de este nuevo gobierno con el ministro Saavedra porque ha estado en una labor más política que técnica. En la primera etapa sí hubo buenos avances, pero ahora hay una beligerancia política cuando deberíamos estar conversando sobre temas de fondo. Y me refiero a cambios en ocho o nueve puntos de la Ley Universitaria, a tener una ley de institutos con reglamento, a la ampliación de las asociaciones público-privadas y una reforma más radical en el tema de los docentes.
—Se está trabajando en la carrera magisterial, ¿qué cree que debe añadirse?
Debería haber una segunda fase. Está bien que prime la meritocracia y sea clave el aumento del sueldo de los maestros, pero hay otros temas preocupantes: la alfabetización digital de los maestros o una recomposición del perfil docente a nivel nacional y la posibilidad que otros profesionales puedan impartir clases. Hoy hay un monopolio de las licenciaturas de pedagogía de parte del Sutep.
—En los colegios de alto rendimiento (COAR), que lanzó el Minedu, sí se permite esto.
Sí. Todos sabemos que es así y también es un mal entendido de que si se permite en todos los colegios esto generará una competencia desleal para los educadores y por tanto se va a reducir la cantidad de empleos. Lo que ha sucedido es que el salario de los profesores ha ido decayendo y la percepción profesional que se tiene de los profesores en la sociedad peruana no guarda el sitial que merece. Esa debería ser una de las medidas radicales y no hay que tenerle miedo a eso.
—En su experiencia en Futura Schools, ¿qué tan complicado es encontrar profesores al momento que abren un colegio?
Es complicado porque hay muchos profesores, pero la cantidad de buenos profesores es bastante limitada. Sin embargo, no es por mala voluntad de los profesores, sino porque no se ha trabajado en la actualización de sus competencias como sí se ha hecho en otras profesiones. Por ejemplo, están enfrentados a lidiar con el uso de tecnologías e información para los alumnos, pero ellos no han sido capacitados para eso. Y muchos no dominan el inglés o están preparados en competencias blandas.