El poeta nicaragüense Ernesto Cardenal fue uno de los homenajeados. (Foto: @FILGuadalajara)
El poeta nicaragüense Ernesto Cardenal fue uno de los homenajeados. (Foto: @FILGuadalajara)
Katherine Subirana Abanto

La historia, tal vez, lo recordará por su inicial apoyo a la revolución de Daniel Ortega y su posterior alejamiento del mismo. Ernesto Cardenal fue una persona que luchó por la soñada coherencia desde muy joven. Nació el 20 de enero de 1925 en Granada, en el seno de una familia acomodada y conservadora que había decidido que el futuro poeta estudie Derecho. Pero los planes del joven Ernesto eran otros: se dedicó a la literatura y viajó a México y Estados Unidos para, en 1957 ingresar a la abadía de Getsemaní, en Kentucky, para formar parte de la Orden de la Trapa, es una orden monástica católica, cuyos miembros son popularmente conocidos como trapenses. Esto sería fundamental para Cardenal, pues ahí conoció al poeta y místico Thomas Merton, quien no solo fue su maestro de novicios, sino también una influencia decisiva en su forma de ver la literatura y el mundo.

Contenido sugerido

Contenido GEC