La conexión inalámbrica se ideó en 1989 como una manera de crear un lenguaje común entre computadoras y celulares. Se lanzó por primera vez en 1999 en forma de auricular manos libres para móviles. Y en 2019 no solamente es un estándar en cualquier dispositivo electrónico portátil, sino que el Bluetooth también es una potencial amenaza para la seguridad de tus pertenencias. Al menos así lo sugiere una nota aparecida en Wired que alerta de una serie de robos en San Francisco que, al parecer, tendrían una misma modalidad.
Esta consiste en deambular por estacionamientos buscando esta clase de aparatos cuyos dueños los han dejado en el auto. Poco importa cuán bien camuflados estén, el astuto facineroso cuenta con un scanner que le permite detectar todos los dispositivos que tengan el Bluetooth encendido en ese momento. Como en muchas computadoras, tabletas y celulares este se activa por defecto, no importa que esté en modo dormido o en ahorro de energía.
Los usuarios más atentos y precavidos probablemente apaguen la señal Bluetooth de la laptop o el teléfono cuando no la usan, pero la mayoría desconoce siquiera cómo saber si el Bluetooth está encendido. Hasta que las empresas que fabrican estos chiches no enmienden semejante error de diseño, las autoridades aconsejan valerse del consabido método de no dejar objetos de valor en un auto.