Erick Benites: “Hay que narrar la agresividad con pinzas”

Después de publicar varios cuentos, el peruano Erik Benites (Lima, 1979) publica su primera novela que además tiene su propio soundtrack: el grunge. La obra se llama El futuro es una máquina que nunca se acaba y cuenta la vida de tres adolescentes que van creciendo durante la década de los ochentas y noventas. Es una historia de búsqueda, pues es una época de transición no solo en su vida, sino de la sociedad en sí.

Erik explica que eligió el género grunge por un tema personal. “Es lo que yo conozco. En la época de las tareas escuchaba radio Miraflores o doble nueve, esas eran las canciones que se escuchaban todo el día. Además, como la novela tiene personajes violentos, el grunge era la banda sonora adecuada”, dice el autor.

Aunque los años ochentas y noventas parezcan tiempos muy lejanos para las nuevas generaciones, la novela toca temas que no pasarán de moda: la búsqueda de una figura paterna, el sentido de pertenencia, la agresividad y la violencia.

Benites aborda los conflictos a través de sus protagonistas Mauricio y Javier. El primero, líder del grupo, cumple un rol que el escritor bautiza como el no padre. “Es el líder de los niños por ser mayor un par de años. Lo siguen porque les deslumbra la desfachatez, que sepa más que ellos y que los trate de mocosos. Él es quién les enseña el grunge”, explica el autor. Y por otro lado, Javier, es un niño “super violento, ahorcó a su perro. Es un personaje que entiendes el porqué de su agresividad. Su mamá se dedicaba a hacerse cirugías plásticas y no estaba en casa”.

Aunque muestra cierta afinidad por la forma en la que se narra la violencia en la literatura, Erick Benites no se declara agresivo ni violento. "Hay que narrar la agresividad con pinzas para no caer en clichés ni comentarios trillados”, dice, y reconoce al escritor español Ray Loriga como una de sus mayores influencias.