Un estudio reciente publicado por Annals of Internal Medicine demuestra que los productos lácteos contienen un compuesto llamado ácido transpalmitoleico, el cual reduciría el riesgo de padecer diabetes tipo 2 y Mellitus hasta en un 60%.
Este hallazgo podría cambiar la forma en que los pacientes diabéticos cuidan su alimentación. Sobre esto, Arnaldo Hurtado, médico nutriólogo de Laive, señala: “La recomendación a los diabéticos siempre fue disminuir el consumo de alimentos como la leche, el yogur, el queso y la mantequilla; sin embargo, ahora esto cambia porque el ácido transpalmitoleico se encuentra justamente en ellos”.
Algo importante que se debe considerar es que los lácteos tienen un bajo índice glucémico, lo que significa que no impactan considerablemente la glucosa en las personas con diabetes. No obstante, lo ideal es que los pacientes adultos con diabetes consuman la leche descremada, baja en grasas y sin colesterol. Además, las personas intolerantes a la lactosa deben optar por la versión deslactosada, u otros productos como el queso o el yogur, aunque siempre en porciones moderadas.
Encuentra aquí deliciosas opciones que puedes preparar con leche descremada.
El especialista de Laive puntualiza también que los lácteos son alimentos formadores, por lo que su recomendación es consumir tres porciones al día. Por ejemplo, un vaso de leche o yogur de 250 mililitros, en promedio. (Prueba estas recetas deliciosas y saludables de yogur de mango, yogur especiado, yogurshake energético y yogur de plátano).
Por otra parte, en los casos en que los pacientes diabéticos posean problemas renales, el consumo de derivados de la leche deberá realizarse bajo supervisión médica.
MÁS ARGUMENTOS Por si esto fuera poco, según otra investigación científica publicada en The American Journal of Clinical Nutrition, el consumo de vitamina D –presente en muchos productos lácteos fortificados– aumenta la función de las células productoras de insulina y responsables de metabolizar los azúcares en pacientes prediabéticos, entre un 15 y a un 30 por ciento. Así que, después de todo, todavía hay elementos que suman al consumo de la leche y sus derivados.
EL DATO El estudio sobre el ácido transpalmitoleico fue realizado por investigadores de la Escuela de Salud Pública de Harvard, y contó con la participación de 3.700 personas a las que se hizo un seguimiento de casi 20 años.