La neumonía representa el 14% de todas las defunciones de menores de 5 años, reveló la Organización Mundial de la Salud. De hecho, solo en 2019, esta enfermedad provocó la muerte de 740.180 niños a nivel mundial. Por ello, es fundamental saber en qué consiste y las formas que existen de combatirla.
“Estamos conformados por distintos órganos únicos y todos forman parte de la integridad corporal. En el caso particular del pulmón, cuando existe una infección que altera la estructura, es decir, los microbios invaden el tejido y producen una alteración, estamos hablando de neumonía”, estableció el Dr. Julio Muñoz, médico auditor de Pacífico Salud.
Muñoz añadió que la neumonía, dependiendo del nivel, puede producir alteración en la función respiratoria, pues afecta al paciente en distintos grados. “Estamos rodeados de microorganismos de distintos tipos, como las bacterias, los virus, los parásitos y los hongos. Cualquiera de ellos puede entrar al organismo e infectarlo, produciendo neumonía”, añadió.
En palabras de Alfredo Pachas, Director Médico del Centro de Enfermedades Respiratorias y Neumología Peruana, existe un grupo de personas con mayor tendencia a padecer esta enfermedad. “Entre ellos, se encuentran los fumadores, pacientes con asma, con problemas cardíacos, insuficiencia renal, cáncer, inmuno comprometidos o quienes consumen alcohol”, resaltó.
¿Cuáles son los síntomas de la neumonía en niños?
De acuerdo con el Dr. Alfredo Pachas, a más graves son los síntomas, más grande es la neumonía. “Se sabe que la neumonía puede llegar a ser severa, sobre todo cuando hay factores de riesgo o el niño es menor a cinco años”, agregó.
Muñóz indica que existen neumonías donde solo, en un pulmón, es afectado el tercio inferior. Esta neumonía basal pequeña, según el experto, se presenta en síntomas como fiebre y escalofríos, pero no va a repercutir en la función respiratoria. No obstante, si la neumonía ya abarca dos tercios del pulmón o ya afecta ambas bases pulmonares, existe un compromiso neumónico que afecta el 30% de los pulmones, por lo que va a repercutir en la función respiratoria y generar la necesidad de mayor oxígeno.
En el caso de los niños, el médico de Pacífico Salud menciona que, aunque la regla continúa siendo la misma, los síntomas sí podrían diferenciarse. “Si hablamos de un niño pequeño, como un recién nacido, el neonatólogo debe identificar el aumento de la frecuencia respiratoria, las alteraciones en la sangre y la saturación de oxígeno”, especificó.
- Tos
- Fiebre
- Dificultad para respirar
- Respiración acelerada
- Retraimiento de la parte baja del pecho al inhalar
¿Cuáles son los síntomas de la neumonía en bebés?
En cuanto al niño lactante, en la mayoría de casos, se observará un cuadro febril, congestión nasal y, en algunos pacientes, bronquitis. “En casos así, un niño pequeño no sabe expresarse, por lo que puede mostrar llanto constante y alteraciones en su comportamiento. No se pueden evaluar síntomas, pero sí signos”, sostuvo el doctor.
El Dr. Pachas aseveró que, entre las alteraciones del comportamiento, el pequeño puede mostrarse poco hambriento o sin ganas de jugar, además del aumento de la frecuencia respiratoria. “Debemos prestar mucha atención a estos casos, pues el niño de por sí tiene menos defensas que un adulto, por lo que el riesgo es mucho mayor en pequeños menores de cinco años”, afirmó.
Al momento de realizar el diagnóstico, los especialistas señalan que el adulto da más pautas al hablar, pero, en el caso del niño, se tiene que realizar una evaluación más exhaustiva, pues puede costarle expresar lo que está sintiendo con palabras. En ciertos casos, la enfermedad también puede ser diagnosticada mediante el uso de radiografías o pruebas de sangre.
¿Qué tratamientos existen para la neumonía infantil?
En primer lugar, es fundamental tener en cuenta que el tratamiento dependerá de qué microorganismo está ocasionando la neumonía. Según Muñóz, las bacterias y los virus son los más frecuentes.
Según lo establecido por la Organización Mundial de la Salud, la neumonía debería tratarse con antibióticos. En ese sentido, señalan que la opción para el tratamiento de primera línea suele ser la amoxicilina en comprimidos dispersables. La OMS indica que la mayoría de casos requieren antibióticos por vía oral, que suelen recetarse en los establecimientos de salud por el especialista correspondiente. En casos o episodios graves de neumonía, se considera la hospitalización del paciente.
“Aparte del tratamiento, la prevención es sumamente importante. Por ello, recomiendo que los padres sean responsables con los esquemas de vacunación de sus hijos”, señaló el doctor de Pacífico Salud.
En esa línea, para finalizar, el Dr. Pachas mencionó que algunos hábitos también forman parte de la prevención, como abrigarse en las bajas temperaturas, usar mascarilla si algún compañero está resfriado, tomar bastante líquido y lavarse las manos con frecuencia, un hábito que adquirimos durante la pandemia.