Recuerda no descuidar la relación con tu hijo mayor, dedícale tiempo para conversar y realizar actividades que le gusten a él. (Foto: Freepik)
Recuerda no descuidar la relación con tu hijo mayor, dedícale tiempo para conversar y realizar actividades que le gusten a él. (Foto: Freepik)
Redacción EC

Cuando una pareja tiene por primera vez atraviesa una serie de acontecimientos nunca antes vividos y durante los primeros años o meses es muy probable despertar cada día con una serie de interrogantes y preocupaciones en torno a su crianza. Aunque toma su tiempo, la práctica hace al maestro y con el paso del tiempo la tarea se vuelve más llevadera.

Tras la llegada del segundo bebé, los sienten se sienten un poco más expertos en la materia y ya cuentan con algunos procesos aprendidos. Sin embargo es importante precisar que cada es un universo diferente y que la fórmula que te resultó con el primer niño, no sea igual con este nuevo integrante. Por ello hemos preparado algunos consejos que serán bastante útiles ante la esperada llegada.

Evita las comparaciones

Partimos de que cada ser humano es individual, con gustos, intereses y procesos diferentes al del resto de su familia y de su entorno. Muchas veces los padres suelen comparar el desarrollo de ambos hijos, haciendo especial énfasis en el pequeño y diciéndole que debe ser como el mayor. Este hecho, lejos de motivarlo, influye negativamente en su autoestima, genera frustración y desarrolla sentimientos poco amigables hacia el mayor.

Encargar la responsabilidad del menor al mayor

Sí, los hermanos están para apoyarse. No obstante el cuidado y la supervisión de un menor de edad debe estar a cargo de un adulto. Por más que el hermanito mayor sea adolescente, no quita que aún sea pequeño para la responsabilidad de salvaguardar al infante.

Sobreproteger al segundo

Los niños pequeños requieren de algunas atenciones especiales debido a que necesitan de sus cuidadores para realizar algunas cosas. Sin embargo es importante reforzar su independencia y permitir que explore su entorno por sus propios medios. Excederse en su protección lo volverá tímido, dudosos y poco sociable.

Descuidar al primer hijo

Cuando hay un nuevo integrante en casa solemos enfocarnos en su cuidado y de forma involuntaria dejamos de prestarle atención al hijo mayor. Este escenario podría hacerlo sentir desplazado y poco querido, además despierta celos ante el nuevo niño que captura toda tu atención. Es esencial crear un balance entre ambos hijos darle su espacio al hermano mayor, un tiempo en el que solo los dos puedan disfrutar y dialogar; si lo pide, dejarlo participar de las atenciones a su hermanito, de este modo fortalecerán sus vínculos.

No des nada por sentado

La nueva experiencia trae consigo nuevas aventuras y retos, desde el proceso de embarazo, el parto, la lactancia y la crianza. Este nuevo bebé será el inicio de otro periodo lleno de lecciones y aprendizaje.

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