Hasta diciembre del 2023, el Seguro Social de Salud (EsSalud) registró 939 casos nuevos de Virus de la Inmunodeficiencia Humana, más conocido como VIH, 100 más que en el 2022. Por lo tanto, EsSalud sostuvo que el incremento de pacientes es evidente. Entre ellos, se encuentran múltiples jóvenes en busca de formar una familia y, aunque antes no se tenía claro, hoy en día tienen la oportunidad de lograrlo gracias a los avances de la ciencia médica. Tres especialistas en el rubro nos explican cómo es posible.
“En el pasado, la gente se moría de VIH porque no habían tratamientos. Luego, las pocas medicinas que aparecían eran bastante malas, llenas de recetas que no tenían ningún efecto en los pacientes. Las mujeres, gracias a los medicamentos disponibles en la actualidad, pueden llegar a tener una carga viral cero. Es cierto que el virus nunca va a desaparecer, pero es una carga tan baja que no se puede ni medir. Por lo tanto, gracias a estos procesos, claro que sí pueden tener hijos. Desde ya hace 5 o 10 años que venimos implementando y mejorando la técnica”, estableció el Dr. Augusto Ascenzo Aparicio, ginecólogo y experto en fertilidad asistida de la Clínica Miraflores.
¿Por qué antes no se recomendaba que los pacientes de VIH tengan hijos?
Conforme a la Dra. Alicia Seminario, ginecóloga especialista en fertilidad de la Clínica Ricardo Palma, los pacientes con VIH enfrentan el riesgo de transmitir el virus a sus hijos durante el embarazo, el parto o la lactancia. No obstante, con el tratamiento y el asesoramiento adecuado, es posible reducir exponencialmente este riesgo. “Por lo tanto, como se desaconseja la concepción natural, las parejas con VIH que deseen tener hijos pueden explorar las opciones de reproducción asistida bajo la supervisión de profesionales médicos especializados en el tratamiento del virus”, aclaró.
La experta sostuvo que otras enfermedades que también pueden transmitirse durante el embarazo incluyen la hepatitis B, la hepatitis C, la sífilis, el herpes genital y el virus del papiloma humano (VPH). “Es vital que las personas con estas enfermedades reciban atención médica especializada y asesoramiento para reducir el riesgo de transmisión a sus hijos”, enfatizó.
El Dr. Julio Díaz Pinillos, médico ginecólogo especializado en fertilidad del Centro de Reproducción Humana de Lima Nacer, añadió que lo mismo sucede con todas las enfermedades sexualmente transmisibles, como la clamidia, el micoplasma genial y la ureaplasma. “Por ello, actualmente tenemos métodos de filtros con los cuales podemos evitar la transmisión de estas enfermedades en el laboratorio”, reiteró.
¿Qué procesos se realizan para garantizar un embarazo sano en los pacientes con VIH?
Para empezar, es preciso explicar qué es la reproducción asistida en sí. “La reproducción asistida abarca los procedimientos que se realizan en parejas que tienen problemas de infertilidad, es decir, que no logran el embarazo de forma natural, por lo que necesitan recurrir a un tratamiento en el cual se evalúa tanto a la mujer como al varón para determinar cuál es el problema. Con la causa ya diagnosticada. se determina qué tipo de tratamiento se necesita”, aseguró el Dr. Julio Díaz Pinillos, médico ginecólogo especializado en fertilidad del Centro de Reproducción Humana de Lima Nacer.
De acuerdo con el Dr. Ascenzo, la reproducción asistida puede ser de alta o baja complejidad. Por un lado, la forma más sencilla es la inseminación intrauterina, donde se toma el esperma, se prepara y lo dejan dentro del útero durante los días que la mujer está ovulando. Por el otro, la más compleja es la fecundación in vitro. “Aquí y en cualquier parte del mundo, ambas tienen aproximadamente un 60% de probabilidades de funcionar. Hay muchas variantes para que este porcentaje suba o baje, como la edad. A mayor edad, hay menos posibilidades de salir embarazada, pero nunca habrá un 100% de probabilidades de que el proceso sea exitoso”, agregó.
Con eso en cuenta, el Dr. Ascenzo explicó que el tratamiento es distinto para la mujer y el hombre. Por una parte, en el caso del varón se requiere de una capacitación espermática, la cual se aplica para limpiar el semen de cualquier virus presente. “Se convierte en un esperma 100% sano procedente de un paciente de VIH positivo con carga viral indetectable”, aseveró.
¿Carga viral indetectable?
Para que un paciente de VIH pueda iniciar un proceso de reproducción asistida necesita tener la confirmación de parte de su médico, la cual tiene que establecer que él o ella cuenta con carga viral indetectable. Esto se logra gracias al tratamiento antirretroviral para combatir el virus de la inmunodeficiencia. “No podemos poner un embrión en una mujer que le va a transmitir un virus al bebé. Cuando ella, gracias al tratamiento, tiene 0 carga viral, recién ahí se puede iniciar el tratamiento”, resaltó Ascenzo.
En el caso de la mujer, se recomienda la fertilización in vitro cuando ya no puede salir embarazada por tratamientos más simples. “El tratamiento para reducir la carga viral es guiado por un médico especializado en VIH. Aquel doctor es el que nos brinda la aprobación a nosotros, los expertos en fertilidad, para poder realizarle el proceso a la paciente, quien ya está limpia de carga viral. Una vez que se le coloca el embrión en el útero, se le da un tratamiento hormonal como a cualquier otra persona”, asintió el doctor de la Clínica Miraflores.
¿Qué tomar en cuenta antes, durante y después del proceso de reproducción asistida?
Antes del tratamiento, como se mencionó previamente, es necesario que la paciente sea de carga viral indetectable. Durante y después del proceso, se continúa pidiendo lo mismo, por lo que debe continuar con los retrovirales de forma estricta como siempre, al igual que las hormonas que se requieran post fertilización.
“Al momento de dar a luz, recomendamos que el parto sea por cesárea, pues un parto natural podría hacer que se mezcle la sangre de la madre con la del bebé. Lo mejor es evitar cualquier posible riesgo”, afirmó el Dr. Ascenzo.
Después del nacimiento del bebé, las recomendaciones dependerán bastante del médico encargado. “En nuestra institución, no aconsejamos dar de lactar, pero algunos libros dicen que la lactancia no tendría por qué contagiar la enfermedad, siempre y cuando se utilicen los medicamentos necesarios. Nosotros, por precaución, preferimos evitarla”, comentó.
El experto en fertilidad también agregó que, en algunos casos, el pediatra puede sugerir que el bebé reciba el tratamiento retroviral durante las primeras semanas o meses. De todos modos, el tiempo y la forma ya es decisión de aquella especialidad. “En todos los casos que hemos visto en la clínica, es algo que nunca ha sucedido. De todas formas, algunos especialistas deciden optar por el medicamento como una precaución”, especificó.
“Deben llevar un embarazo bajo control estricto por especialistas. Se han publicado múltiples estudios de embarazos en mujeres seropositivas utilizando técnicas de reproducción asistida, sin que haya habido ningún caso de transmisión vertical (TV). El control adecuado del embarazo es fundamental para reducir este riesgo”, certificó la Dra. Seminario.
Un caso de éxito para los pacientes con VIH
El Dr. Augusto Ascenzo nos contó un poco sobre uno de los casos de éxito más recientes en Clínica Miraflores para poder ejemplificar este proceso. “En este caso, la mujer tenía VIH, pero su esposo no. Ella no podía salir embarazada, pues no podía tener relaciones sexuales ya que podría contagiar a su pareja. Por ello, en su caso, primero se hicieron un par de inseminaciones para ver si funcionaba de la forma más sencilla. Al no salir con esa metodología -de seguro por un problema en las trompas- se procedió a la fecundación in vitro”, declaró.
“Se le estimularon muy fuerte los ovarios y se le sacaron algunos óvulos. Antes de realizar este proceso, se realizó una medición para confirmar que la paciente es de carga viral cero. De todas maneras, se limpian los óvulos, se juntan con el esperma y se le realiza un estudio al embrión obtenido. Luego de todo esto, la paciente logró tener un bebé sano”, manifestó Ascenzo.
A pesar de la efectividad del tratamiento -tanto antirretroviral como el de fertilidad- algunas clínicas deciden no realizarlo. “Tengo pacientes que vienen y me dicen ‘a mí no me han querido atender porque tengo VIH’, lo cual me parece espantosamente discriminatorio. Obviamente yo no voy a aceptar hacerle un tratamiento a una persona con carga viral positiva, pero si se toman todas las precauciones indicadas, se puede realizar. No podemos quitarles el derecho que tienen a formar una familia”, enfatizó el especialista en fertilidad.
“Sin duda los avances han sido inmensos. Desde el punto de vista médico, actualmente es muy raro que un paciente con VIH muera, pues los retrovirales disminuyen completamente su carga de contagio. Puede suceder que el paciente fallezca por infecciones secundarias, sí, más no por el virus en sí. Gracias a estos tratamientos, el laboratorio tiene acceso para realizar el procedimiento de fertilización con seguridad, evitando la transmisión y asegurando la salud del embrión”, finalizó el Dr. Díaz Pinillos.
Un procedimiento de fecundación in vitro (FIV) puede costar entre 14 mil y 20 mil soles, dependiendo de cada pareja. Si, por ejemplo, hay necesidad de un estudio genético de embriones, el tratamiento puede ser más costoso. Por otro lado, si la paciente es una joven con obstrucción de trompas es más económico.
TE PUEDE INTERESAR
- Descubre el poder de dar a luz en tus propias manos con el parto humanizado
- ¿Cuál es la relación entre la salud dental de la madre en el embarazo y la salud del bebé?
- Cómo evitar la intoxicación en el embarazo: alimentos prohibidos y recomendaciones
- Control prenatal: estas son las ecografías que toda embarazada se debe realizar
- Lactancia materna: ¿qué debo saber antes de empezar a dar de lactar?