Bentley, el perro de Nina Pham, enfermera estadounidense que contrajo ébola, tuvo una suerte radicalmente a la de Excalibur, can de la española Teresa Romero que fuera sacrificado el 9 de octubre pasado.
Las autoridades de Estados Unidos no solo decidieron por no sacrificar al pequeño perro, sino que además fue cobijado en un centro de acogida de animales denominado Dallas Animal Services and Adoption Center.
El País de España remarca que, a diferencia de lo ocurrido con Excalibur, inclusive la prensa de EE.UU toca el tema de distinta manera.
Dr. Beckam -vet who cared for Bentley tonight. She hugged him and took good care of him. @1500Marilla @DallasShelter pic.twitter.com/UNFc7tawz3
— Sana Syed (@dallaspiosana) octubre 15, 2014
@CleaningGuysllc dog is scared, but now has food and water. pic.twitter.com/k2Rhs2qouK
— Sana Syed (@dallaspiosana) octubre 12, 2014
SIGUE LA POLÉMICA EN ESPAÑA
El Mundo informó esta tarde que Lucas Domínguez Rodríguez, director del Centro de Vigilancia Sanitaria Veterinaria (VISAVET) y responsable del operativo que terminó con la vida de Excalibur, renunció a su cargo.
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